Con un módulo del presidente de la Asociación Rosarina de Estudios del Cannabis, Ignacio Canabal, bajo el inocente título: "Siembra, conocimiento, cosecha y militancia", se lanza hoy el segundo año lectivo de la Universidad Rebelde, un proyecto del Movimiento Giros destinado a generar otras estrategias de formación, en los márgenes del conocimiento académico. Desde las 20, en la sede central de Giros (Avellaneda 1285), se podrá asistir a un "acercamiento a la historia de las drogas ilegales y su prohibición" así como el debate "en torno a los usuarios y sus imaginarios sociales, y los usos medicinales e industriales". La Universidad Rebelde defiende la gratuidad, y por lo tanto sólo recibirá aportes "muy voluntarios" para sostener el proyecto.

Los módulos previstos para este año, al menos por ahora, son cuatro. Notas Negras, coordinado por Ezequiel Gatto y Pablo Juvany, aborda la diversidad de la vida de los afroamericanos en Estados Unidos, desde la esclavitud y la segregación, pasando por las luchas comunitarias, las producciones artísticas y las demandas sociales. Este módulo, que comenzará el próximo miércoles 20, a las 19, es la continuidad del que ofrecieron, los mismos coordinadores, el año pasado, y el interés se mantendrá en lo alto por la riqueza de cada clase. En Nuevo Alberdi --donde el Movimiento Giros desarrolla su trabajo territorial-- se dictará el módulo de Tecnologías de los alimentos, con la coordinación de Soledad Michalek.

En tanto, el jueves 21, desde las 20, comenzará "El dispositivo y su estructura", bajo coordinación de Juan Cruz Cattena y Agustín Mac Donald. Se anuncia como "un cruce fructífero entre el psicoanálisis y la filosofía".

La iniciativa de la Universidad Rebelde nació a finales de 2009, cuando el Movimiento Giros luchaba por la expropiación de 250 hectáreas de Nuevo Alberdi en la Legislatura provincial. "Allí empezamos a entender que debíamos asumir nuevas tareas, más de la globalidad de lo urbano, y planteamos la escuela de formación", explicó uno de los integrantes de Giros, Alejandro Gelfuso. Esa fue la semilla de la Escuela del Territorio Insurgente Camino Andado (Etica), hoy en pleno funcionamiento como bachillerato con 30 alumnos regulares. La Universidad Rebelde, en cambio, fue concebida por fuera de la práctica territorial, para "superar la instancia de organización barrial y asumirse como movimiento social", apuntó Gelfuso.

"Mientras viajábamos a Santa Fe, para acampar frente a la Legislatura pidiendo la expropiación definitiva de la zona rural de Nuevo Alberdi, nos dimos, una vez más, la discusión sobre cuáles eran las bases fundamentales para pensar la ciudad futura", cuentan los protagonistas de Un/R. Sus preocupaciones pasaban por "qué cosas se necesitaban, además de la voluntad interminable de miles de sujetos colectivos, para hacer carne la búsqueda de pistas y caminos que puedan cambiar todo lo que deba ser cambiado". Entonces, "apareció la formación, no para los clásicos talleres, sino con una visión amplia de lo que significa la construcción de conocimiento colectivo y su disrupción como acción concreta".

La Un/R comenzó a funcionar a fines del año pasado, cuando Giros concentraba sus energías en impulsar la ordenanza que prohibió la instalación de barrios privados. De este modo, aunque no sean proyectos concebidos en conjunto, siempre se enlaza con las luchas territoriales del movimiento. Sobre la Un/R, Gelfuso indicó que "son módulos libres que no figuran en ninguna Universidad, y son llevados adelante por profesionales, no necesariamente docentes". La participación es libérrima. La duración de cada módulo es variable, de acuerdo a las necesidades de desarrollo, y la frecuencia de clases puede ser semanal o quincenal. En realidad, el proyecto escapa a cualquier formalización, pero sí apuesta a expandirse. "Queremos que se sustenten módulos sobre problemáticas que no son de las agendas políticas o académicas, pero que generan nuevos conocimientos", definió Gelfuso. "Universidad Rebelde inicia su segundo ciclo, con módulos libres y jornadas especiales, porque la disputa no se da en un territorio, sino en todos", dicen desde Giros.