Representantes del club de fútbol Juan XXIII firmaron ayer con la Municipalidad de Rosario un carta de intención en la que acepta el traslado de sus instalaciones desde avenida Pellegrini y Valparaíso a 27 de Febrero y Valparaíso. El acuerdo que deberá ahora ser refrendado por una asamblea de socios y aprobado por el Concejo Municipal, prevé que el municipio asuma el costo de construcción de la nueva cancha de 160 mil pesos, y el traslado de dos canchas de baby fútbol al predio que quedará en manos de la institución deportiva, en avenida Pellegrini y Lima. La idea es que con ese dinero la entidad construya canchas de fútbol, ocho torres de iluminación, baños, vestuarios, sala de reuniones y un cerco perimetral. La cesión de terrenos será por veinte años con una opción por más años. En el predio desocupado será construida por la Empresa Provincial de la Energía una estación transformadora.

Adolfo "Fito" Rinaldi, presidente de Juan XXIII relató a Rosario/12 que en el acta firmada en la tarde de ayer el municipio se comprometió a entregar 160 mil pesos para hacer las instalaciones del nuevo estadio en los terrenos de 27 de Febrero entre Valparaíso y Río de Janeiro. "Es decir una cancha para once jugadores completa más vestuarios, alambrado olímpico, baños completos, tribunas, sembrado del césped, iluminación y todo lo necesario para funcionar", dijo.

En tanto en el terreno remanente "sobre avenida Pellegrini hasta Lima, unos poco más de 60 metros sobre los 112 metros que teníamos hoy, la municipalidad tiene que trasladar nuestras dos canchas de baby fútbol, así como remodelar las instalaciones que fueran necesarias para funcionar, como la secretaría y el buffet", apuntó Rinaldi.

El dirigente confesó que "estamos conformes con los terrenos cedidos. Ahora si todo se aprueba en el Concejo resta aceptar la propuesta en una asamblea de socios del club".

El acta fue rubricada por el intendente Miguel Lifschitz, el interventor de la EPE Luis El Halli Obeid, ya que de acuerdo a un convenio firmado entre la Municipalidad y la EPE el 9 de marzo de 2005, el Ejecutivo municipal se había comprometido a liberar esos terrenos para dar vía libre a la construcción de la estación transformadora.

Sin embargo durante todo este tiempo no hubo acuerdo entre el club y la Municipalidad, que le había ofrecido a Juan XXIII una serie de terrenos en la zona para que la entidad se mudara que incluía un terreno triangular detrás del Carrefour, en el barrio Hostal del Sol. Obviamente la idea no prosperó y la construcción de la EPE hasta ahora no pudo cristalizarse.

El tema fue discutido este verano con los reiterados cortes de energía eléctrica que afectaron a esta ciudad. Los inconvenientes llevaron ayer al edil justicialista Osvaldo Miatello a impulsar en el Concejo un pedido de informes para que el municipio explique los por qué de las demoras.

Cabe recordar que la propuesta que fue firmada ayer estaba en manos de las autoridades del club que aceptaron destrabar el traslado tras el ofrecimiento del subsidio de 160 mil pesos para aplicarlo a la construcción de nuevas instalaciones.