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A poco más de un mes de finalizar el año, se produjo la primera muerte de 2011 por maltrato infantil, en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela. La víctima es una beba de diez meses, que recibió una terrible golpiza de parte de su padre, quien está detenido a disposición del juez de Instrucción, Juan Andrés Donnola. Walter Scheffer, de 24 años, está acusado (en principio) de "homicidio calificado". La madre de la nena, de 27 años, lo denunció en la Comisaría 11º, tras la brutal agresión contra ella y su pequeña hijita, durante la tarde del sábado pasado. Personal policial reconoció que el hombre "contaba con antecedentes de otras denuncias por maltrato, en distintas dependencias". Estas fueron radicadas por la madre de los dos hijos de la pareja, que apenas nació la nena se la dio a una pareja para protegerla de la violencia que sufría ella dentro de la relación. Sin embargo, la tragedia no se evitó. La nena, que permaneció en estado crítico casi dos días, murió alrededor de las 11 de ayer, según confirmó la subdirectora del Vilela, Velia Peralta. La médica recordó que hay un preocupante incremento de casos: en lo que va de este año, llegaron más de 150 niños y niñas golpeados.

El sábado pasado, alrededor de las 17, la pareja mantuvo una discusión en su vivienda de Ayacucho 4224. Según relató Miriam S. ante el juez, durante el intercambio verbal, el hombre la golpeó fuertemente, mientras ella tenía a la beba en brazos. En medio de las agresiones, la nena se cayó al suelo y el agresor la levantó y la arrojó contra una cama. Tras los golpes, Walter echó a su mujer de la casa. Miriam se ausentó durante dos horas, y cuando regresó, encontró a su pareja durmiendo y aprovechó para llevarse a la beba y a su otro hijo de un año y medio.

Según indicó el juez Donnola, la mujer vio a la nena "algo dañada, sin percibir la gravedad" del estado de la chiquita. Sin embargo, los tres salieron de la casa y fueron hasta el Hospital Provincial, aunque se fueron de allí sin que los médicos encontraran una complicación grave. Horas después, la niña se descompensó y su madre la llevó hasta el hospital Roque Sáez Peña, donde hizo un paro cardiorrespiratorio, y decidieron trasladarla al Vilela.

El domingo al anochecer, la pequeña Damaris Ailín llegó al centro de salud con signos de haber sido golpeada de manera brutal. En la edición impresa de ayer, Rosario/12 adelantó el hecho de violencia familiar, que antes del mediodía terminó de manera trágica: la pequeña, que permanecía en coma profundo con respiración asistida, falleció ayer en una cama de la sala de cuidados intensivos del Vilela.

Peralta indicó que la beba ingresó "en paro cardiorrespiratorio, sumamente grave, con hematomas en todo su cuerpo, con distintos grados de evolución, por lo que fue conectada a un respirador artificial, pero permaneció en estado crítico en todo momento; en coma profundo", resumió la profesional. El estado de la chiquita "hacía pensar seriamente en un caso de maltrato infantil", dijo.

Allegados a la familia indicaron que la mujer era maltratada por el hombre desde hacía tiempo. Tanto es así que cuando nació Damaris su madre se la dio a una pareja conocida para que estuviera lejos de las agresiones. Sin embargo, tiempo después la recuperó, pese a la negativa de la pareja adoptiva que presentó denuncias ante la Justicia sobre la violencia a la que era sometida la beba. Sin embargo, no obtuvieron respuestas.

En lo que va de 2011, llegaron más de 150 casos al Grupo de Atención al Maltrato Infantil, que atiende los casos y brinda contención tanto al niño como a sus tutores, en el Vilela. Las situaciones son diversas:

maltrato psicológico, físico, abuso sexual y hasta lesiones por arma de fuego. El agresor había sido denunciado por Miriam al menos tres veces antes del sábado, en diferentes comisarías.