Ariel "Burrito" Ortega fue el epicentro de un incidente en un cantobar céntrico en horas de la madrugada de ayer, que determinó su traslado a la seccional 2ª, donde fue llevado por el Comando Radioeléctrico, que sin embargo no asentó su ingreso a la comisaría. Según testigos que se encontraban en el cantobar, el jugador fue quien originó los hechos, cuando tuvo un entredicho con una joven, que derivo en un enfrentamiento donde estuvieron involucrados también hinchas de Ñuls y de Central. El jugador quedó en medio del incidente que se desencadenó alrededor de las 3.30 en el local ubicado en calle Santa Fe casi esquina Presidente Roca, donde se encontraba, que se generalizó y que obligó a la intervención policial.

Según fuentes policiales la pelea se habría iniciado por la discusión de dos mujeres y que derivó en una batahola de la que participaron varios de los asistentes, "entre los que se encontraba Ortega". El comisario Sergio Coronel, titular de la seccional 2ª, informó que "al intervenir la policía, uno de los asistentes debió ser demorado por intentar resistirse al procedimiento". Por el contrario, nadie confirmó que el delantero haya sido demorado esta madrugada, luego de haberse peleado con un joven en un bar.

Sin embargo este diario pudo confirmar que no solo Ortega sino un barrabrava de Ñuls conocido como Pimpi llegaron a la seccional 2ª a bordo de uno de los cuatro patrulleros que el Comando Radioeléctrico envió al lugar para terminar con la gresca. Una de las versiones aseguran que el jugador increpó a uno de los presentes en el bar, quien supuestamente lo había "provocado". La hipótesis fue refrenda por un joven, que se identificó como Germán, y que señaló en declaraciones a Radio Dos que "uno de los chicos que estaba al lado mío le gritó algo, pero Ortega se confundió y me encaró. Cuando se venía, lo empujé, se cayeron algunas mesas y nada más. Después me enteré que lo habían demorado", relató.

El hombre aclaró que no golpeó al jugador y agregó: "Sí, soy hincha de Ñuls y muchas veces grité los goles de él. No quería perjudicarlo, así que me fui enseguida".

En tanto, otras voces que habrían participado de la batahola sostienen que los bandos estaban claramente diferenciados. De un lado, los hinchas de Central y del otro el "Burrito" junto a algunos integrantes sindicados como "barrabravas" y que dentro del grupo "canalla" se encontraba un hombre que desempeña tareas como personal de seguridad, que fue agredido por un "barra" leproso.

El centralista se dirigió al personal policial y radicó la denuncia de golpes, agresión y lesiones. La policía detuvo al supuesto implicado y lo trasladó a la seccional 2ª para las averiguaciones pertinentes. La confusión se originó cuando el resto del grupo "leproso" también tuvo que ser trasladado a la comisaría para continuar con las tareas investigativas. Así es como Ortega se dirigió a la dependencia policial, peor no en calidad de detenido. Finalmente, a los pocos minutos el sindicado como agresor recuperó la libertad y el resto de los integrantes del grupo también se retiró de la comisaría.