Cansados de que los bicicleteen. Así se sienten quiénes pelearon para que la ciclovía de calle Salta sea una realidad. Hoy, a casi un año de la aprobación del proyecto en el Presupuesto Participativo que emprende el Municipio, la iniciativa no ha sido implementada. Frentistas y comerciantes de la zona jugaron su papel en la negativa, pero desde el grupo Masa Crítica y la ONG Soluciones Tecnológicas Sustentables (STS) entienden que falta "decisión política" de la Municipalidad y el Concejo para la concreción de la bicisenda. "Muchos de los concejales no tienen conocimiento técnico. Se tiene que hacer lo correcto, lo que dicen los que saben", pidió Gabriel Milanese, integrante de ambas entidades. A lo largo del 2012, enfatizarán el reclamo "para meter más presión con más información" porque considerarán "una derrota que se implemente cualquier cosa que no sea lo correcto".

El proyecto "está muerto, parado", a pesar de que ﷓ aseguró Milanese ﷓ el informe que elaboró el Instituto de Estudios del Transporte dependiente de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) determinó que "tenían que implementarla como debía ser, sin estacionamiento del lado izquierdo, porque era la forma más segura". Ese documento fue enviado al Ejecutivo en vías de que se tome una solución definitiva al conflicto que data del verano del año 2011, pero aún no salió una respuesta desde el Palacio de los Leones. La traba la pusieron, en principio, los vecinos y comerciantes que entendieron que una bicisenda provocaría un descenso en las ventas de los negocios ubicados sobre la mano izquierda de Salta entre San Nicolás y Oroño, unas quince cuadras de extensión. "Comercio sí, bicisenda no", rezaba un pasacalle diseñado por los opositores al proyecto. "Te lo plantean como la fuente de trabajo, no va por ese lado. Va por el egoísmo de que quieren estacionar en la puerta de su casa", entendió Milanese.

A bordo de su bicicleta, el joven de 25 años "siempre" toma el Cruce Alberdi. Vive en Arroyito y es la vía que lo deposita habitualmente en el centro de la ciudad. Pero para acceder al microcentro opta por circular por calle Salta ya que "es la única que tiene conectividad con el norte". En ese sentido, hay "relevamientos" que demuestran es la arteria "donde más personas en bicicletas pasan". Quince cuadras de ciclovía representarían 120 plazas de estacionamiento que para Milanese se podrían suplir deteniendo vehículos a 45 grados "en calles transversales hacia las vías que no tienen mucho tráfico" como Suipacha, Richieri y Pueyrredón.

Para el miembro de Masa Crítica, los vecinos que se opusieron a la bicisenda están "alentados por un sector político". Nombró al edil kirchnerista Arturo Gandolla, quién presentó en el Concejo una propuesta, que se convirtió en ordenanza, que suspendía el labrado de multas a todos los automovilistas que estacionen sobre la ciclovía "dando vía libre a que la iniciativa quede sin efecto en la práctica, no en los papeles". Aunque también destacó las "posiciones diferentes" de algunos concejales socialistas, que "nunca se definían" ya que "te daban vueltas, te bicicleteaban". El movimiento del edil del Frente Para la Victoria trabó el proyecto, cree Milanese, y la "falta de consenso" entre los bloques generaron que al día de hoy la iniciativa esté "en el limbo".