La División Judiciales allanó ayer tres lugares de interés para el desarrollo de la causa en la que el juez provincial Juan Carlos Vienna trata de esclarecer la seguidilla de crímenes narco en Rosario. Un galpón donde fue incautado un vehículo buscado en uno de esos crímenes, una concesionaria de autos y el domicilio particular de una mujer que trabaja en la Secretaría de Seguridad Comunitaria, fueron los sitios elegidos.

El primer domicilio allanado está ubicado en Lamadrid 2200 -en pleno corazón de la comunidad gitana- propiedad de Mariano S., alias Gordo Cacho en sociedad con otro miembro de esa comunidad de apellido M. El galpón de importante dimensiones que en forma de L sale por calle Alvear

y tenía una importante cantidad de vehículos, que los investigadores sospechan podrían ser parte del clan Cantero. "Los compraron en sociedad con Monchi" según especularon ante este diario los pesquisas, que revelaron que además fue secuestrada documentación a nombre de Ramón Machuca, hermano de crianza de los Cantero y conocido como Monchi.

En rigor, los investigadores fueron detrás de un VW Vento 2013 color negro, que fuera visto en instancias anteriores a uno de los asesinatos investigados por Vienna.

El segundo allanamiento tuvo como escenario una concesionaria de autos -en su mayoría Volskwagen- ubicada en bulevar Oroño 6100, que sospechan los pesquisas formaría parte de los negocios familiares de Los Monos.

Allí se secuestraron 4 CPU, uno de ellos con imágenes de video de los últimos tres meses, con los cual se podrán establecer quienes visitaban la concesionaria. También se incautaron biblioratos con transacciones, se sospecha, por el Pájaro antes de ser asesinado.

El último de los allanamientos - y el más importante para los pesquisas- tuvo lugar en España 3085, donde la Brigada Judiciales fuera buscar "al Guille Cantero, así como dinero, documental y armamento".

En el lugar vive Laura S. integrante del Ministerio de Seguridad, específicamente en el Secretaria de Seguridad Comunitaria, quien ingresó a esa cartera hace nueve años.

Allí se incautó un CPU, una netbook, y cinco celulares, además de documental del Ministerio de Seguridad. "Había documentación policial de la oficina de Análisis Delictual donde constan operativos policiales y estadísticas de años anteriores".

Pero lo que más preocupó a los efectivos fue un "bibliorato completo con datos de identidad dependencias, domicilios y teléfonos policiales de jefes de la fuerzas, que suman unas 70 hojas, que podría compararse con un protocolo oficial para comunicaciones". "Salvo que se lleva trabajo ala casa, no se entiende para que lo tenía en su domicilio, sin es una herramienta de trabajo", se preguntaron.

Hubo otro hallazgo: 30 mil pesos en efectivo que quedó en poder de los habitantes del lugar porque adujeron que "era una suma cobrada por un accidente". La última prueba que suma complejidad para la propietaria de la casa allanada son "varios teléfonos celulares donde se hallaron comunicaciones registradas con personal policial detenido, y personas civiles que tienen pedidos de captura o están relacionadas con la investigación", revelaron los pesquisas.

También se incautaron fotografías "de Laura S. con Máximo Ariel, alias Guille Cantero, junto a su esposa, y otras similares junto a Claudio Cantero, al Gordo Cacho a Monchi así como junto a dos de los supuestos sicarios de la banda de Los Monos -uno herido y otro con captura-

La mujer no fue detenida porque "el magistrado entendió que no había peligro de fuga" -dijeron los pesquisas- aunque su condición podría cambiar con el correr de las horas.