La concejala María Eugenia Gigliani (PPS) sumó ayer una nueva denuncia sobre irregularidades en los permisos de construcción de la Torre Shopping Condo Hotel en Arroyito. Según la edila tiene 10 pisos más de los permitidos. En base a nuevos datos que surgen del análisis que hicieron del expediente durante el fin de semana, Gigliani precisó que el edificio tiene 997,57 metros cuadrados más de construcción que los establecidos por el Código Urbano en la sección índice edilicio en esquinas, para todos los terrenos en esquinas hasta 300 metros cuadrados de superficie. En este marco, la concejala reiteró el pedido de citación para el secretario de Gobierno, Fernando Asegurado, el secretario de Planeamiento municipal, Pablo Barese, y la titular de la Dirección de Obras Particulares, María Cristina Funes, para que brinden explicaciones pero no contó con los votos necesarios para formalizar el despacho. De todos modos, anticipó a Rosario/12 que planteará el tema el próximo jueves en la reunión de Labor Parlamentaria.

Gigliani realizó el planteo en la reunión de ayer de la comisión de Planeamiento, tras los cruces que mantuvo la semana pasada con los ediles Viviana Foresi y Manuel Sciutto (PS) a partir de las denuncias de irregularidades realizadas por la concejala del PPS en varias edificaciones de la ciudad, aunque particularmente en la Torre Shopping que se está construyendo en Rondeau y Juan B Justo. Estos cruces promovieran pedidos de deasagravio en el recinto que finalmente fueron enviados para su tratamiento en la comisión de Gobierno.

Por otra parte, el municipio remitió el pasado jueves al Palacio Vasallo la respuesta por el permiso de la Torre Shopping. Según Gigliani, los certificados urbanísticos están mal emitidos porque solamente está asentada la variable del ancho de calle, omitiendo poner la variable determinante que es la de los 36 metros. "Cuando avanzamos en el expediente observamos que funcionarios del Centro Municipal de Distrito Norte, en octubre de 2010, se dan cuenta de esa omisión y piden a sus superiores instrucciones para ver cuál iba a ser el criterio de aplicación", explicó la edila.

"Primero, la directora de Obras Particulares, quien firma una de las hojas, no emite opinión y se limita a dar un pase a Barese. El secretario de Planeamiento y la arquitecta Beatriz Ambrogi, directora de Tramitación y Fiscalización Urbanística, dicen que el criterio a adoptar va a ser el de los certificados urbanísticos; es decir, que pudiendo enmendar el error, avanzan sobre el error", agregó Gigliani.

Desde el oficialismo, aseguraron que en el Código Urbano existe una normativa, denominada retranqueo, para poder sobreelevar el edificio que se construye en una esquina. "El Código plantea dos alternativas: o se utiliza una calle o la otra, no existe la ochava. No estarían forzando la norma, si no que estarían inventando lo que la norma no dice, al punto que creemos que los propios colegios profesionales deberían manifestarse en este sentido", entendió la concejala del PPS.

Gigliani amplió ayer los cuestionamientos a la Torre Shopping al señalar que además de construir más altura de la permitida, construyeron más metros cuadrados. Precisó que para todos los terrenos en esquinas hasta 300 metros cuadrados de superficie los "índices edilicios" máximo podrán ser incrementados en un 33 por ciento, y para la superficie restante se considerará el índice edilicio máximo sin ningún otro tipo de concesión. Al subtotal de la superficie edificable (asumiendo el uso y costumbre con que se maneja generalmente esta tolerancia), se le puede adicionar el 10 por ciento que se encuentra estipulado según la Sección 5.1 del Código Urbano, por tanto la superficie máxima edificable es de 4.582 metros cuadrados, pero se construyeron 5.579. De allí surge que la diferencia: casi 998 metros cuadrados.

Según Gigliani, esta diferencia fue constatada además por los asesores de los concejales Norma López, Roberto Sukerman (FpV) y Jorge Boasso (UCR). "En virtud de esta irregularidad, entendemos que es aún más necesario que los funcionarios concurran a dar explicaciones", indicó la edila. La cuestión fue planteada ayer en la comisión de Planeamiento, pero no contó con los votos necesarios para concretarlo. Como era previsible, se negaron a tratarlo los concejales oficialistas.

La concejala Laura Weskamp (Pro) podía decidir la suerte de la citación, pero la edila macrista optó por levantarse y salir de la reunión, argumentando que no quería quedar en medio de una disputa. "Voy a llevarlo el jueves a la reunión de Labor Parlamentaria donde están todos los bloques del Concejo representados", anticipó Gigliani.