La Cámara Penal confirmó ayer la condena de cuatro hombres acusados de "abuso sexual con acceso carnal" contra dos hermanitas de barrio Gráfico, que tenían 11 y 12 años, en 2010, cuando el Movimiento Evita denunció la situación. En marzo pasado, el progenitor de las nenas recibió la pena de 11 años de cárcel por entregarlas a los aberrantes sometimientos y también por las lesiones que les provocaba. En tanto, el empresario verdulero Antonio Cataldo y dos vecinos del barrio habían sido condenados a 9 años; pero la Alzada cambió la calificación penal en los casos de Cataldo y Agustín Velázquez debido a que en las indagatorias iniciales del expediente no se les había imputado el agravante de abuso "ultrajante" dentro del delito, por lo que su pena se rebajó a 8 años de prisión. En el fallo, uno de los camaristas destacó la labor de la coordinadora territorial del Evita, Alejandra Fedele, quien presentó la denuncia y "puso en marcha la protección para las niñas". En tanto, la defensa de Cataldo adelantó que recurrirá a la Corte Suprema provincial.

El caso salió a la luz en septiembre de 2010, cuando las nenas eran maltratadas en la casa donde vivían con su padre, la pareja del hombre y otros hermanos. El informe médico y de Cámara Gesell de la causa arrojaron que había signos de sometimiento sexual, confirmados con el relato de las niñas. En aquel tiempo, el Movimiento Evita tenía un centro comunitario en el barrio, donde había llegado el dato de que las nenas eran sometidas. Tras la denuncia, fueron rescatadas.

Luego de una intensa investigación, en marzo pasado, el juez de Sentencia Nº 5, Gustavo Salvador, condenó al padre de las niñas, Héctor C. (no se da el apellido para protejer a las menores), de 54 años, por entregarlas a otros adultos, quienes las sometían a prácticas sexuales aberrantes, con filmaciones incluidas. Otro de los sentenciados era vecino de la familia, apodado "Paraguayo" y las nenas cruzaban todos los días a su casa para limpiar, lavar y ser sometidas, a cambio de pocos pesos. La condena alcanzó al comerciante "Tony" Cataldo, de 60 años, por trasladarlas en su 4 x 4, y abusarlas. El hombre tenía puestos de venta en el mercado de Fisherton, donde trabajaba Alfredo Sánchez, el "Paraguayo".

Luego de las penas resueltas, en junio pasado los abogados de los imputados iniciaron la apelación con varias quejas sobre la causa, y pedidos de nulidad de las pruebas como la Cámara Gesell que se realizó a las niñas. También cuestionaron el accionar de Fedele y lo tildaron de "político", frente a su candidatura como concejala; y reclamaron la absolución de sus clientes. Desde la fiscalía y la querella, representada por Ricardo Lamas, del Centro de Asistencia Judicial (CAJ), pidieron a la Cámara Penal que se confirme la sentencia.

Ayer los jueces Otto Crippa García, Georgina Depetris y Carlos Carbone leyeron en audiencia oral la decisión de confirmar la condena; aunque bajaron de 9 a 8 años la pena de Cataldo y Velázquez, por cuestiones técnicas dentro de los delitos achacados.

En el fallo se hizo una referencia a los cuestionamientos hacia Fedele, por la denuncia presentada. "La situación que motivó la denuncia no nace en ese momento, sino que desde 2007 el establecimiento educativo al que concurrían las menores se dirigió a la Secretaría de Promoción Social de la Municipalidad, solicitó la intervención de organismos, sin que se haya realizado algo más que informes, planteos de cómo actuar en el caso, ya que las niñas presentaban problemas de conducta, y signos de ser sometidas a golpizas, mostrando huellas de lesiones. Pese a ello, las menores recién fueron sacadas del ámbito cuando Fedele tomó intervención, lo denunció en la policía, y puso en conocimiento de los organismos municipales y provinciales la razón. No se advierte que trate de obtener ventaja, sino que su tarea en el barrio, donde colaboraba con la copa de leche, fue providencial para hacer cesar lo que todo el mundo sabía en el barrio, el colegio y los organismos indicados", reza la resolución. "Fue la acción de Fedele la que puso en marcha la protección para las niñas. Acaso, se pretendía que sabiendo lo que se le había contado se callara, dejando que las menores siguieran en la situación de violencia, sometimiento, quedarse sin comer por días o encerradas", planteó el juez Crippa García, en su voto.

Además, los jueces rechazaron las nulidades solicitadas por la defensa de los cuatro imputados, relacionadas con la Cámara Gesell, ya que los abogados plantearon que se había adelantado para que la defensa no pudiera controlar.

Desde el CAJ, Lamas saludó la decisión de los magistrados y la calificó de "positiva" y dijo estar "satisfecho después de tanto trabajo", por parte del equipo del Centro de Asistencia y del resto de los actores.