La Cámara Penal rechazó la excusación del juez Juan Carlos Vienna para dejar de intervenir en la causa de Los Monos, por entender que "no surgen motivos que ameriten dar lugar al apartamiento". Uno de los camaristas, Adolfo Prunotto, le dio la razón a la jueza Alejandra Rodenas, quien rechazó el expediente a mediados de octubre por no compartir el criterio de su colega, ya que "en modo alguno indica cuáles serían concretamente los motivos que lo colocarían en situación de `violencia moral'", tal como alegó Vienna en su excusación. Para Prunotto pasarle la investigación a otro juez, cuando solo restan cuestiones de trámite, "afecta los escasos recursos del sistema". Vienna, a quien se le fue restituido el expediente, dijo ayer que aún no había sido notificado de la resolución.

A partir del fallo que se dio a conocer ayer, el juez Vienna deberá hacerse cargo nuevamente de la causa en la que hay 36 personas imputadas por asociación ilícita. Si bien el magistrado indicó que aún no sabe cómo continúa la situación, se estima que debería resolver la recusación presentada por tres abogados defensores, antes de que se excusara.

Prunotto entendió que "corresponde que sea rechazada la inhibición pretendida, con apoyo de los mismos argumentos sostenidos por Vienna: que la causa se encuentra prácticamente concluida y que sólo restan unas pocas providencias de trámite y la elevación a juicio; con lo cual, desprenderse de la causa cuando sólo restan trámites administrativos, importa una clara violación al código de forma, en particular a los principios de concentración, inmediatez, simplificación y celeridad; afectando con estos planteos los escasos recursos con que cuenta el sistema, provocando un desgaste jurisdiccional inútil".

Para el camarista resulta "contradictorio" que el juez haya rechazado una primera recusación, en abril pasado, cuando los abogados defensores pidieron que se apartara por "temor de parcialidad", luego de que salieran a la luz planillas migratorias que daban cuenta de sus viajes coincidentes con Luis Paz, padre del Fantasma, cuyo homicidio disparó la investigación del magistrado. Es que Prunotto considera que Vienna habló de "violencia moral en relación a personas allegadas (a él), como prueba que califica de `impertinente' -a partir de la foto panorámica del estadio de boxeo estadounidense donde se los ve sentados a dos asientos de distancia, uno de los cuáles ocupa la pareja del juez-, pero no explica quién es el familiar, ni qué se pretende del mismo". "Resulta difícil entender cómo una circunstancia que se desconoce, coloca al juez en situación de violencia moral", sostuvo.

Vienna reiteró que la fotografía que se presentó como prueba --por parte de los defensores-- "es falsa". También rechazó la denuncia que hizo en su contra el comisario Sergio Blanche, uno de los procesados. "Yo no lo cité, vino por motu propio. No hubo extorsión porque yo no le recomendé ningún abogado", aseveró sobre el video de cámara oculta filmado en el despacho de Vienna, que presentó el policía en el Ministerio Público de la Acusación, para acusarlo por haberle aconsejado que cambiara de abogado.

Sobre las acusaciones que llegaron a la Corte Suprema de la provincia, señaló que él mismo hizo el descargo y está presentando pruebas, como el resumen de sus tarjetas donde figura que con su sueldo solventó los viajes de mayo y diciembre de 2013 a Estados Unidos y copia de los pasajes.

Por su parte Paul Krupnik, abogado defensor de Blanche, entendió que a partir de la resolución de la Cámara, Vienna deberá responder la recusación planteada en su momento: "Va a tener que explicar sus viajes, sus gastos y la foto".