Alberto Perassi, padre de Paula, la mujer desaparecida desde setiembre de 2011 en San Lorenzo, disparó ayer una nueva polémica al recordar las palabras que el anterior juez de la causa le dijo en la cara. "El juez Eduardo Filocco en algún momento me tendrá que explicar por qué no hizo absolutamente nada, y por qué me dijo en los primeros días de su desaparición que Paula era una loquita que se había calentado y que ya iba a volver. Después, en los tres años que tuvo la causa no hizo nada",

afirmó el hombre que logró revertir la historia después de tres años y medio, con el pedido de detención contra altos jefes policiales y oficiales de la jefatura de San Lorenzo. "Me manosearon, me mintieron, lo que me hicieron no se lo deseo a nadie", dijo el padre de la víctima al borde del llanto, al recordar las circunstancias que atravesó en los últimos años en que los policías lo engañaban diciendo que su hija estaba viva. En tanto, ayer comenzó el trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense en el predio ubicado en la ruta 11 y vías del Ferrocarril, en el límite entre Timbués y Puerto General San Martín, donde se presume puede estar el cuerpo de Paula.

Alberto Perassi, se quebró ayer al recordar las instancias por las que tuvo que atravesar cuando jueces, fiscales y policías lo engañaron al encubrir a los sospechosos del crimen de su hija. "Nunca voy a terminar de agradecerle al fiscal Donato Trotta lo que está haciendo, después de tantos años sacando a luz la verdad", dijo conmovido ante las nuevas acciones judiciales que intentan develar lo sucedido con la joven.

La semana pasada los fiscales Trotta y Ramón Moscetta pidieron al juez penal de San Lorenzo, Juan José Tutau, la detención de nueve sospechosos, entre ellos cinco policías, de haber participado en la desaparición de Paula Perassi, quien falta de su hogar desde el 18 de septiembre de 2011. Sobre ellos, Perassi recordó que "en los primeros días de lo sucedido fui una presa fácil para esta gente que hizo lo que hizo, pero después me di cuenta que dentro de la Jefatura de Policía de San Lorenzo sabían perfectamente lo que había pasado con Paula", señaló.

Perassi conjeturó acerca de lo que podría haber pasado con Paula. "Un poco lo que siempre se dijo, que había un aborto de por medio, que el aborto había sido consentido por ella, que iba a ir a un sanatorio de Rosario, y se ve que ella tenía sus problemas, que no iba a poder resistir una cosa de esas, y terminó como terminó", se lamentó.

En ese sentido, Perassi rememoró uno de los peores momentos que transitó cuando la policía encubría al sospechoso y quería hacer creer que Paula estaba viva. "Me impactó toda esta connivencia de la policía. Lo peor fue cuando en un momento de la causa dijeron que la habían visto en Zavalla. Nunca voy a olvidar un día estaba sentado en un Peugeot 206 negro con el agente, comisario Aldo Gómez, y la oficial (María José) Galtelli. Me llevaban en un auto a buscarla y luego ellos tenían comunicación con el imputado".

"Han hecho un desastre conmigo, no pueden hacer semejante cosa, son por demás de... no quiero decir palabras feas, pero han hecho lo peor conmigo, que creo no me lo merezco, he sido siempre una persona bien, un laburante que me tocó esto, me han manoseado, es insoportable", expresó.

Los policías que señalan los fiscales eran jefes de Unidades Especiales de la Unidad Regional 17, Jorge Krenz, y de la Agrupación Cuerpos, Daniel Puyol, así como los oficiales María José Galtelli, Ramón Godoy y Aldo Gómez, todos a cargo de la pesquisa de la desaparición de Perassi.