Requisas nocturnas que violan la intimidad de las detenidas, ya que interrumpen su descanso; la irrupción de hombres del Servicio Penitenciario que las encuentran durmiendo o bañándose; la comida pésima y escasa; la falta de medicamentos que las internas deben comprar por sí mismas y sobre todo, la restricción de las visitas como así también de la entrega de mercaderías que sus familias les llevan para aliviar el encierro fueron algunas de las denuncias que motivaron al Defensor General de la provincia, Gabriel Ganón, a presentar un recurso de hábeas corpus por la situación de la Unidad Penal número 5 de ingeniero Thedy 375. A partir de esa presentación, la jueza penal Marcela Canavesio abrió las pruebas sobre las violaciones a los derechos humanos denunciadas y convocó a una audiencia para el 30 de abril.

La medida surgió a partir de la carta abierta de Ana María Basualdo, interna que denunció maltratos y prometió matarse si no le mejoraban las condiciones de detención. El lunes pasado, Ganón presentó el recurso y anteayer se realizó la audiencia de la que participaron también la directora de la cárcel de mujeres, Graciela Romano y la inspectora adminitrativa de Ejecución Penal, Lucía Masneri. Estuvieron también los fiscales Rafael Coria y Alvaro Campos.

Tras la publicación de la carta de Ana María en Rosario/12, los funcionarios del Servicio Público de la Defensa Penal se entrevistaron con la mujer de 46 años, que les hizo llegar una solicitud de todas las detenidas en los pabellones de planta alta, planta baja, disciplina y autodisciplina. Las mujeres denunciaron las situaciones que agravan sus condiciones de detención.

"Las anomalías denunciadas se vinculan con deficiencias estructurales, generando violencia y violaciones permanentes a los estándares constitucionales de derechos humanos para mujeres privadas de libertad; y con la violencia que se genera entre quienes habitan el espacio de la prisión a partir de la deficiente gestión del Servicio Penitenciario", expresó el escrito de Ganón. "Teniendo en consideración la eventual responsabilidad internacional tanto del gobierno de Santa Fe como del Estado argentino por incumplimiento de sus obligaciones de respeto y garantía de los derechos de las personas privadas de la libertad, entiendo debe hacerse cesar de inmediato el agravamiento de las condiciones de detención de los internas de la Unidad Penal N 5 de Rosario", expresó Ganón.

La directora de la Unidad respondió las preguntas de la jueza, la defensa y la fiscalía, sobre el funcionamiento de la unidad que dirige. Una vez que escuchó los testimonios del Defensor y también de Romano, la jueza citó a una nueva audiencia, el 30 de abril, de la que participarán "una interna madre, una interna embarazada, una interna de Planta Alta y una interna de Planta Baja designadas con presencia de la Dirección, la Defensa y con invitación a la Fiscalía". De este modo, Canavesio podrá escuchar a las propias detenidas sobre las condiciones de detención.

La jueza también decidió notificar a una encargada de medicación del penal ubicado en Ingeniero Thedy 275, a los fines de presentar un informe respecto de la "recepción, destino y entrega de la medicación" y poner a disposición de las partes las historias clínicas de las internas para que sean expuestas, previo consentimiento, en la audiencia de fin de mes.

A Romano le pidieron un informe sobre las sanciones disciplinarias otorgadas a las reclusas desde el 1º de enero de este año hasta el 30 de abril. Con respecto a la alimentación, el Instituto del Alimento deberá examinar la cantidad y la calidad de las raciones de comida que se entregan.