El edificio del diario El Ciudadano amaneció ayer con pintadas amenazantes a un reportero gráfico, relacionadas a disputas entre los equipos de fútbol de la ciudad. Con aerosol, personas aún no identificadas, escribieron la fachada del inmueble donde funciona la redacción, en Dorrego al 900. También arrojaron panfletos. El Sindicato de Prensa de Rosario (SPR) repudió las amenazas y se reunió con el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto. En un comunicado, la Comisión de Libertad de Expresión y Formación Profesional del SPR expresó "su más enérgico repudio por las pintadas que personeros de la violencia hicieron contra el frente del diario El Ciudadano y contra uno de sus periodistas, en relación con el clásico que entre los equipos de Rosario Central y Newell's Old Boys se disputará el domingo". "Te vamos a matar, sin aliento", dice la inscripción en la puerta ventanal donde está la redacción. Allí mismo se tiraron volantes con fuertes amenazas hacia el reportero gráfico Ignacio P. "Es una muestra digna de la más fuerte intolerancia que recurre a la violencia para enrarecer el clima del clásico que se jugará el domingo entre Newell`s y Central", refiere el texto que distribuyó el sindicato que nuclea a los periodistas en la ciudad de Rosario. Según expresa el comunicado, "es la segunda vez que el periodista es víctima de amenazas relacionadas con el fútbol. Ya había sufrido una situación similar en junio pasado. Esta comisión consultó en la sede del Ministerio Público de la Acusación, pero en virtud de la feria judicial no había quien tomara la denuncia. Al mismo tiempo el Sindicato fue recibido por el ministro Lamberto, ante quien se volvió a plantear la preocupación por la seguridad en el trabajo de los periodistas y en particular por esta grave amenaza". El jefe de la Policía de Rosario, Miguel Oliva, destacó los altos niveles de colaboración tanto de la dirigencia de Newell's como de Central, y de ambas hinchadas; pero también repudió las pintadas amenazantes al diario, y la consideró --al igual que con las de la casa de la familia del futbolista Maximiliano Rodríguez-- "arrebatos". En Lt3, Oliva dijo: "Quiero dejar en claro que repudiamos este acto que trata de opacar lo que va a ser una fiesta popular, que es el clásico". "Estuvimos reunidos y establecimos algunas pautas para trabajar y dar las garantías necesarias para que (los periodistas) puedan desempeñar sus funciones. Se ha establecido un teléfono de contacto, que es el mío, como el del jefe de región, y se van a bajar directivas para algunos encargados del sector como también realizar patrullajes en la zona del diario", concluyó el alto jefe policial.