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El secretario de Seguridad de la provincia, Gerardo Chaumont, reconoció que en Rosario hay inseguridad, pero sostuvo que la situación está "un poco mejor". En la misma línea destacó que "la tasa de homicidios bajó un 22 por ciento este año" y aseguró que "pasamos a disponibilidad a unos 400 efectivos en los últimos meses". De paso se quejó de la "suerte de estigmatización nacional" que padece la ciudad y desestimó que "no se pueda vivir" en Rosario. El funcionario admitió que "en estos momentos la ciudad vive un pico de delincuencia".

El hombre clave de la Seguridad en Santa Fe abundó: "No me van a escuchar decir que estamos bien y tampoco decir que la gente que opina que estamos mal está equivocada". En ese sentido, admitió que "hay inseguridad, no estamos bien pero tampoco estamos peor: estamos un poco mejor, aunque no del todo lo que pretendemos estar".

"Cuando uno escucha en una ciudad de 1,5 millón de habitantes que hay dos taxistas asaltados, dos colectiveros asaltados, un arrebato, un herido, una entradera, uno llega a la conclusión que esta es una ciudad invivible (sic). Sin embargo, yo no creo que en esta ciudad no se pueda vivir, más allá de la suerte de estigmatización nacional que hicieron sobre Rosario", agregó Chaumont.

Con respecto a la portación de armas por parte de ciudadanos, el secretario de Seguridad Pública expresó que este año se secuestraron unas 2.000 en allanamientos y controles policiales de rutina. Por último, el funcionario explicó que en su puesto "no se puede hacer lo que uno quiere de un día para el otro", pero resaltó que deben "seguir avanzando" con las actuales políticas.