El decano y la vicedecana de la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), José Goity y Marta Varela, por solicitud de 12 consejeros directivos, tomaron ayer la decisión de suspender la sesión de Consejo Directivo. La reunión había sido convocada para las 9, en el marco de la suspensión de las clases por el accidente del pasado miércoles en el que Julieta Heredia, una becaria del Conicet que había venido a la ciudad para participar de un congreso, sufriera heridas de consideración al caer un blindex que estaban colocando en el sexto piso del nuevo edificio de Corrientes al 700. Las autoridades de la facultad comunicaron que la decisión fue tomada porque el edificio estaba tomado por agrupaciones político﷓estudiantiles, la no concurrencia del personal no﷓docente, por decisión gremial, debido a la ocupación de su lugar de trabajo, y por las manifestaciones de violencia verbales y físicas hacia el decano de la facultad por parte de algunos miembros de agrupaciones. "Queremos que retornen las clases lo antes posible", señaló el presidente del centro de estudiantes de la Facultad, Felipe Portas, de la agrupación Mate Cocido.

A través de un comunicado, las máximas autoridades de la Facultad de Humanidades de la UNR expresaron que más allá de la voluntad que tenían para realizar la reunión del Consejo Directivo, "los hechos descriptos configuran una situación de falta de garantías y condiciones institucionales﷓administrativas para organizar la sesión", y que "estos hechos, de por sí graves, complican la delicada situación por la que atraviesa la facultad".

Durante la noche del jueves, los estudiantes mantuvieron la vigilia en la Facultad para garantizar que permanezca abierta, con la idea de participar hoy a las 9 de la reunión del Consejo Directivo, finalmente suspendida. "Quisieron demostrar que éramos los culpables de la suspensión", señaló Portas, luego de la asamblea de ayer.

Desde allí salieron varios planteos, entre otros, el de retomar las clases lo antes posible, aunque no en el nuevo edificio de calle Corrientes, gestionando la posibilidad que se dicten en alguno de los dominios de la UNR. "Planteamos que en el edificio que estaba en construcción donde sucedió el hecho no haya clases hasta que se asegure que esté en condiciones para el cursado. Por eso exigimos que haya una comisión que regule y haga un seguimiento específico", indicó el presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad.

Por su parte, desde COAD insistieron que desde "distintos ámbitos y en numerosas ocasiones, hemos denunciado la falta de seguridad en el nuevo edificio de la Facultad de Humanidades y Artes, llamados de atención y alerta que si hubiesen sido escuchados por las autoridades de la Facultad y la UNR, el `accidente` que dejó internada en el HECA a la joven Julieta Herrera, sencillamente podría haber sido evitado".