Luego de acceder al informe de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo de la Nación (SRT) sobre el accidente del pasado 30 de setiembre en el nuevo edificio de la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR, en la que una becaria del Conicet sufriera heridas de consideración por la caída de un blindex, docentes y estudiantes marcharon ayer hacia la sede de Gobierno de la UNR para reclamar seguridad en las actividades académicas que se realicen en el edificio de calle Corrientes al 700. El informe de la SRT destaca que en el cuarto, quinto y sexto piso faltan realizar obras. "Vamos a pedir que todas las obras que se tengan que hacer se hagan cuando no exista ningún tipo de actividad académica", dijo la secretaria Adjunta de Coad, Patricia Propersi. La dirigente gremial planteó que se constituya "de inmediato" la Comisión de Higiene de la facultad, y exigirán una investigación que "arroje un responsable político". Por su parte, el decano José Goity aseguró: "Incorporamos todas las observaciones y estamos trabajando en esa dirección".

El Consejo Directivo de la Facultad de Humanidades autorizó al decano Goity a retomar las actividades académicas el pasado 8 de octubre, basados en los informes presentados por la secretaría de Política Estudiantil de la UNR y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN). Las autoridades habían consensuado con el resto de la comunidad educativa pedir un tercer informe a la SRT, pero decidieron no esperar que lo remitieran, argumentando que los otros informes convalidaron que el nuevo edificio cumplía con la normativa y estaba apto para su funcionamiento.

Esto motivó las críticas de docentes y estudiantes que se negaron a cursar en el edificio de calle Corrientes al 700, hasta tanto no recibieran el informe de la SRT al que finalmente tuvieron acceso, y que en sus conclusiones, a partir de la inspección realizada el 7 de octubre, refiere que "se observa que en los pisos 4, 5 y 6 faltan realizar terminaciones, ajustes, conexiones de los equipos de calefacción, plegado de ductos de ventilación, colocación de puertas y divisiones en sanitarios y trabajos de electricidad".

Según la SRT, si la Universidad decidiera continuar con las tareas faltantes mientras se lleven a cabo tareas didácticas, para garantizar las condiciones de seguridad deberá listar todas las tareas que falten ejecutar para la finalización de la obra. Por otra parte, el informe plantea que las tareas con riesgo se deberán ejecutar únicamente en horarios donde no concurra personal docente, no docente, alumnos y otros. Las tareas con bajo riesgo se podrán realizar con medidas preventivas, rubricadas por representantes del empleador y UNR, y charlas de cinco minutos antes del inicio de las mismas.

"El informe, que incorporamos, hace algunas menciones a cartelería y otras cuestiones que hay que hacer que ya están en curso, y luego hace especificaciones respecto a qué medidas se tienen que tomar en caso que se haga alguna intervención mientras haya alumnos y docentes para que se tomen recaudos", explicó Goity. "Sí estamos trabajando para la capacitación del personal en un esquema de evacuación de emergencia provisoria hasta tanto el edificio esté terminado", agregó.

Por su parte, Propersi indicó que pidieron una ampliación del informe para conocer los detalles de toda la documentación solicitada en la denuncia, pero consideró que en el mismo no sólo hablan del sexto piso, desde donde cayó el blindex que impactó en la becaria del Conicet, "también le dan el mismo tratamiento al cuarto y quinto piso".

La dirigente gremial dijo que no aceptan "el calificativo de accidente cuando previamente hay una advertencia clara". Por tal motivo adelantó que iban a plantearle al decano que se trabaje en actividades académicas hasta el tercer piso, y que se creen las condiciones para que no haya ningún tipo de contacto con los tres pisos superiores: "Que la presencia de operarios se de cuando no exista ningún tipo de actividad académica".

Sobre las responsabilidades por lo que ocurrió, Propersi dijo que exigirán que haya "una investigación que arroje un responsable político". La SRT es muy clara al plantear que son "corresponsables la empresa y la Universidad que contrata las obra y crea las condiciones, por eso no se pueden escudar detrás de la empresa".