Quedó en libertad el hombre arrestado como presunto partícipe del abuso de una nena de 14 años, el 16 de agosto pasado, en zona sudoeste; mientras que sigue preso el sindicado autor, que estaría involucrado en otros casos. El hecho tiene un entramado complejo, en el que se investiga si hay personal policial implicado, ya que la víctima reveló que un patrullero la detuvo para requisarle la mochila. Minutos después, más adelante en su caminata de regreso de la escuela, dos hombres la obligaron a subir a un Fiat Duna. Según dijo la niña, estaban vestidos como policías. El imputado que recuperó la libertad --apresado por tener un nombre similar al del anterior dueño del Duna secuestrado-- no fue reconocido por la niña en rueda de personas. Además, mensajes whatsapp y testigos lo ubicaron en la casa de unos amigos, a la hora del hecho. Para la fiscal Carla Cerliani no existen elementos para mantenerlo preso, por lo que acordó darle la libertad mientras se esperan los resultados de ADN. Sebastián H. deberá irse a vivir a otra casa, alejada de familiares de la víctima, pero sigue ligado a la pesquisa que, además, intenta dar con el móvil policial mencionado por la nena.

El caso de A. dejó al descubierto la investigación que este diario dio a conocer meses atrás, sobre una serie de abusos sexuales a jóvenes de barrios humildes con una mecánica similar: vestido de policía, un hombre se les acercaba a las víctimas en un auto y les pedía que las acompañara para señalar puntos de venta de droga o personas relacionadas con ese delito, para luego abusar de ellas. Hasta junio estuvo preso un hombre, a quien libertaron tras un ADN negativo.

El caso más reciente es el de la nena de 14 años, que fue sometida tras salir de la escuela de barrio Acindar, donde cursa el secundario. Ella caminaba por la zona de Avellaneda y Doctor Riva cuando, primero, la detuvo un patrullero y dos policías le requisaron la mochila en busca de droga; mientras que varios metros más adelante, un Duna gris con vidrios polarizados y dos hombres arriba, la amenazaron con un arma, la metieron en el vehículo y se la llevaron bajo amenaza de llevarla presa. Ella viajaba sentada en el asiento del acompañante. El hombre que conducía, Luis E. --detenido e imputado en la causa--, la sometió sexualmente, a punta de pistola, en un descampado de Uriburu y Circunvalación. Tras amenazarla de muerte, la llevó a su casa.

En tanto, se intenta dar con el hombre que viajaba en el asiento trasero del auto, que no participó del abuso, pero sí del momento previo. En principio se creyó que era Sebastián H., el hombre liberado ayer.

Las pruebas contra Luis E., en tanto, son contundentes, ya que la propia jovencita lo reconoció como el atacante en rueda de personas; mientras que la fiscal espera los resultados de pruebas de ADN, para confirmar que sea el autor del hecho. También será sometido a reconocimiento con respecto a otras víctimas de una docena de abusos que se investigan desde el año pasado en la Unidad de Delitos Sexuales.

En tanto, el defensor público provincial espera fecha de audiencia de constitución de querellante para la madre de la niña del último ataque, ya que hay fuertes sospechas respecto la participación policial en el hecho.