Mauro Pinela, el hombre acusado de violencia machista contra su ex pareja que ayer debía ir a juicio oral en libertad no se presentó en Tribunales y el juez Luis María Caterina ordenó su captura por rebeldía. Hace más de tres años que la mujer sufre hostigamientos varios por parte de su ex pareja, a quien denunció unas cincuenta veces. Le rompió vidrios, le impidió salir a trabajar y ni siquiera la dejaba ir a buscar a los niños a la escuela. El imputado tiene antecedentes penales por asaltos a mano armada y estuvo preso mientras su hijo era bebé.

La fiscal Raquel Almada iba a pedir ayer una pena de tres años de prisión efectiva. El Ministerio de Seguridad entregó un botón de pánico para la víctima y sus dos hijos pequeños.