La Justicia Civil y Comercial condenó por mala praxis médica a un pediatra, a un cardiólogo y al Sanatorio de la Mujer, quienes deberán pagarle más de 3 millones de pesos a los padre de una beba que falleció a los 24 días de vida. La niña nació el 4 de junio de 2005 en ese centro de salud y por antecedentes cardiológicos en la familia le efectuaron una ecografía para determinar el flujo de sangre. Tras ser dadas de alta, la madre y la beba concurrieron a la obra social y le practicaron a la pequeña un electrocardiograma. Luego les indicaron que regresaran al mes para un nuevo control. Sin embargo, la beba murió el 29 de junio. En la pericia solicitada por la jueza Susana Gueiler, de Civil y Comercial Nº 18, se destaca que "no se tomaron los recaudos necesarios ni se dio la importancia suficiente al antecedente de malformación que portaba" la pequeña.