Si bien las autoridades municipales hicieron un balance más que positivo de la conducta de los rosarinos durante la madrugada del 1º de enero, en las primeras horas del Año Nuevo se registaron más incidentes que en los festejos de la última Navidad. El caso más delicado fue una niña de 4 años que resultó gravemente herida en la cabeza por una bala perdida, quien se encuentra internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela en estado reservado ya que los médicos no consiguieron extraer el proyectil. Además, otra chica de 11 y un nene de 12 sufrieron heridas de arma de fuego en brazos aunque están fuera de peligro. En una gresca, un hombre sufrió la amputación una mano al ser atacado a machetazos. Hubo 13 accidentes de tránsito leves, tres test de alcoholemia positivos y sólo cuatro heridos por el uso de pirotecnia. "Hay que tener en cuenta que hubo más gente en la calle y en los principales boliches en comparación con el 24 por el buen tiempo y los resultados fueron similares", reconoció Fernando Asegurado, subsecretario de Gobierno municipal. Al mismo tiempo, para el municipio mejoró la prestación del servicio de taxis.

La víctima más grave de los festejos por la llegada del Año Nuevo, de nombre Yamila, de 4 años, estaba en el patio trasero de la humilde vivienda de sus padres ubicada en Casiano Casas al 1300, cuando fue herida por una bala que le ingresó por la calota craneana frontal. Sus padres la llevaron al Hospital Alberdi del cual fue derivada de inmediato al Vilela", donde a las 5 fue intervenida quirúrgicamente sin que se le retirara el proyectil que quedó alojado en la aorta, según informó a la agencia DyN el jefe de terapia, Eduardo Casim.

Según la policía, la nena aparentemente miraba como arrojaban cohetes al aire, cuando el proyectil, que habría efectuado hacia arriba supuestamente algún vecino, cayó con fuerza y le entró en la cabeza. Al cierre de esta edición el médico de la guardia del Vilela, Gustavo Sciolla, informó a Rosario/12 que el estado de Yamila seguía siendo delicado aunque había evolucionado en las últimas horas. "Está un poco mejor, todavía es prematuro para dar un pronóstico, pero somos optimistas", agregó.

En el mismo hospital en la madrugada fue atendida de una herida de bala que le atravesó el antebrazo izquierdo, Gabriela, de 11, mientras se encontraba en el patio trasero de su casa de Cantuta al 1700, del barrio Las Flores. También está internado un nene de 7 años, con heridas múltiples que le provocó el estallido de un petardo en la mano.

En el Hospital Roque Sáenz Peña, fue atendido un chico de 12 años, quien resultó herido en la puerta de su casa de Jazmín al 7200, del barrio Las Flores, cuando recibió un balazo en el brazo derecho. Fue dado de alta tras la curación. En el Hospital Eva Perón, de Granadero Baigorria, fue atendido un hombre de 35 años de un disparo en el brazo derecho, otra persona de lesiones leves por pirotecnia y un herido de arma blanca. En una gresca que se registró aproximadamente a las 5 de la madrugada en una villa de Larrechea y Boedo, Miguel Angel Nicasio, de 40, recibió un machetazo que le provocó la amputación traumática de la mano izquierda.

En cuanto a heridos por pirotecnia, la municipalidad contabilizó cuatro casos menores. Desde la Policía se informó el caso de una mujer de 44 años, Estela, que vive en Colombia 1310 bis y sufrió heridas cortantes, por las que debió ser atendida en el Hospital Alberdi, al intentar arrojar una bomba de estruendo. Un chico de 7 años, de nombre Agustín, debió ser trasladado al Vilela por quemaduras en mano, pierna y tórax.

Para las autoridades municipales el balance de los festejos de la madrugada del 1º de enero fue positivo. "Hay que tener en cuenta que al no llover como en Navidad, hubo mucha más gente en la calle y los resultados fueron similares que en el 25", destacó Fernando Asegurado.

Según el municipio hubo cerca de 8000 personas en la zona del Parque Independencia entre las fiestas realizadas en el Hipódromo y la Rural. En la zona norte mucha gente en los bares, pero poca en el balneario La Florida. También hubo una importante concentración de personas en los boliches ubicados en el Patio de la Madera y la Fluvial. "Tuvimos pocos heridos por pirotecnia, 13 accidentes leves y sólo tres test de alcoholemia positivos. En general el comportamiento de la gente fue muy bueno", apuntó el subsecretario de Gobierno.

En rigor, no hubo operativos de alcoholemia sino más bien tareas de

prevención y detención de automovilistas bajo conducción peligrosa. Entre los tres resultados positivos, uno de ellos arrojó 2.36 (el máximo permitido es 0,50) que iba en contramano en Moreno al 2300.

De acuerdo a los datos de la Secretaría de Servicios Públicos, la prestación del servicio de taxis mejoró en comparación a años anteriores, aunque por momentos fue complicado conseguir una unidad.