"El gobernador cometió un error", disparó ayer el intendente Miguel Lifschitz, consultado sobre la oferta de un aumento salarial del 12% que hizo Jorge Obeid a los gremios estatales. El anuncio de Obeid no sólo generó un amplio rechazo en la totalidad de los sindicatos que nuclean a los agentes públicos santafesinos, sino que además disparó la discusión entre los municipales de Rosario. El anuncio oficial "no hizo más que anticipar un debate que -en nuestro caso- no estaba previsto para esta altura del año", se quejó el intendente. La respuesta de la provincia no se hizo esperar y el encargado de cruzarlo a Lifschitz fue el ministro Coordinador Rubén Michlig. "El intendente de Rosario no sabe de lo que está hablando. Desconoce que nosotros teníamos un compromiso desde el año pasado con los gremios estatales, para formalizar una oferta de incremento de sueldos. Lo que hicimos fue cumplir con ese compromiso", aseguró el funcionario que habitualmente pilotea las negociaciones con los agentes públicos.

El intendente Lifschitz tenía en la agenda el incremento del boleto de colectivos y la discusión con los taxistas por la tarifa de ese servicio; pero no imaginaba que ya en la segunda quincena de enero iba a estar discutiendo con los trabajadores municipales una nueva recomposición salarial. "Nuestros agentes recibieron un 20 por ciento el año pasado y si bien quedamos en que íbamos a volver a hablar del tema durante el 2007, jamás pensamos que volveríamos a discutir el tema en el primer mes del año", admitió el jefe del Palacio de los Leones.

-Así que el anuncio de Obeid no le hizo ningún favor a usted- lo consultaron ayer a Lifschitz por LT8.

-Más que nada me parece que no le hizo ningún favor a las arcas públicas.

La semana pasada, tras el anuncio de la provincia sobre la oferta salarial, el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario Néstor Ferraza fue muy concreto al señalar que para este año esperan del Ejecutivo una recomposición salarial "igual a la del año pasado", es decir, un 20%. Y había anticipado que para febrero "debe convocarse a discusión paritaria" y que "los secretarios generales de los gremios municipales de la provincia se reunirán en plenario el mes que viene en el marco de la Festram".

El intendente recordó que el presupuesto 2007 ya fue aprobado por el Concejo y que, en esa estimación de gastos "no está previsto ningún incremento de salarios", dijo Lifschitz y recordó que cuando se otorgó el incremento salarial en 2006 "hizo falta pedir al Concejo la aprobación de un refuerzo presupuestario".

Al respecto, Ferraza calculó que el presupuesto municipal de este año, respecto de 2006 "aumentó en más de 150 millones", y agregó: "No sólo hay que pensar en las obras o servicios sino también en el salario de los trabajadores".

Enterado de las declaraciones del intendente Lifschitz, el ministro Coordinador del gobierno de Jorge Obeid, Rubén Michlig aseguró que "así como nosotros no nos metemos en la política salarial de Rosario, el intendente debería abstenerse de opinar sobre la política salarial de la provincia", en referencia a la frase del socialista quien señaló que Obeid "cometió un error" al adelantar un oferta de incremento de sueldo para los provinciales. "Lifschitz no sabe de lo que está hablando, nosotros teníamos un compromiso con los gremios y lo cumplimos. Ahora comenzarán las negociaciones para arribar, como siempre lo hemos hecho, a un acuerdo", concluyó el ministro santafesino.