Por primera vez en años, Rosario tiene una tasa de desempleo de un sólo dígito. Lejos de los casi 23 puntos registrados a mediados del 2003, la desocupación en la ciudad y su área metropolitana en el cuarto trimestre del 2006 fue del 9,5 por ciento, de acuerdo a los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. En comparación con igual período del 2005, el desempleo bajó en un año 2,2 por ciento. Sin embargo el Gran Rosario sigue teniendo uno de los índices de desocupación más altos del país, por encima de la media nacional (8,7). La tasa de subocupación (individuos que trabajan menos de 35 horas semanales) también descendió 0,3 por ciento y se ubicó en el 7,9 por ciento. En total, en la zona hay 101 mil personas con problemas de empleo. En la ciudad de Santa Fe la desocupación es más baja que la de Rosario: 8,4 por ciento.

Los datos dados a conocer ayer, desagregados para cada uno de los principales 31 aglomerados urbanos del país, complementan los difundidos a comienzos de marzo, oficilizados por el propio presidente Néstor Kirchner durante la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso. Ese día el jefe de Estado anunció el desempleo a nivel nacional: 8,7 por ciento y se abrió la puerta a la eliminación de la doble indemnización.

De acuerdo a la información del Indec, en el Gran Rosario sobre una población total de un millón 232 mil personas, 577 mil son económicamente activas, 522 mil están ocupadas, 55 mil desocupadas y 46 mil subocupadas (trabajan menos de 35 horas involuntariamente, algunas de ellas busca otro trabajo para completar la carga horaria, otras no).

Comparando el último trimestre del 2006 con el mismo lapso del 2005 se evidencian tres fenómenos simultaneos: aumentó la cantidad de personas que busca empleo (tasa de actividad), subió la capacidad de generación de puestos de trabajo genuinos (tasa de empleo) y descendió la desocupación. Las estadísticas se convirtieron así en un correlato directo de la reactivación de la actividad económica de la región, focalizada en la construcción, la industria y la actividad agropecuaria.

Así, la tasa de desempleo de la ciudad y su área metropolitana pasó del 11,7 al 9,5 por ciento en un año, mientras que la subocupación descendió 0,3 por ciento y se ubicó en 7,9 por ciento. Atrás quedaron los tiempos posdevaluación donde la región padeció las consecuencias de una década con tipo de cambio fijo: en el segundo trimestre del 2003 a poco de haber sumido Kirchner, el desempleo había llegado al 22,9 por ciento.

Más allá de la mejora de las estadísticas que evidenció la región, el Gran Rosario sigue teniendo una de las tasas de desempleo más altas del país, muy lejos de ciudades relativamente parecidas como Mendoza (3,5 por ciento), ciudad de Buenos Aires (6,6) y Córdoba (6,9). Se excluye de esta comparación a Río Gallegos, la capital santacruceña que ostenta la menor desocupación del país (1,2 por ciento y el Gran Catamarca que con el 11,6 por ciento posee la tasa más elevada.

La ciudad de Santa Fe tuvo en el cuarto trimestre del 2006 una desocupación del 8,4 por ciento, algo mayor a la registrada en el tercer trimestre del año pasado (se había ubicado en 7,3 por ciento).