Convocada por el concejal del ARI, Nire Roldán, se llevó a cabo ayer en el Palacio Vasallo una reunión entre supermercadistas locales y trabajadores agremiados en la Asociación de Empleados de Comercio, para tratar el tema del descanso dominical. "El deseo de esta mesa es cerrar los domingos", fue la frase elegida por Roldán cuando finalizó el cónclave. Empleados de comercio y empresarios locales coincidieron en que el descanso dominical es un derecho de los trabajadores, y que se debe iniciar un camino de diálogo para alcanzar los consensos que determinen las acciones políticas en ese sentido. Por tal motivo, se acordó continuar con esta Mesa de Diálogo, que volverá a reunirse dentro de un mes.

De la reunión participaron representantes de la Asamblea de Pequeños y Medianos Productores (APYME), de distintos Centros Comerciales de la ciudad, la legisladora provincial Mónica Tomei, el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, el Centro Unión de Almaceneros, Federación Agraria Argentina, Mercado de Productores de Rosario y la Pastoral Social de la Iglesia.

Para el concejal Roldán, quien impulsó el encuentro, "existe una convergencia de intereses, para que finalmente se pueda cerrar los domingos". El edil del ARI destacó la buena voluntad de los presentes, y auguró que los resultados se verán pronto, ya que "estas reuniones servirán para que el descanso dominical deje de ser un discurso y se convierta en una verdad objetiva, que beneficiará a todos los ciudadanos de Rosario".

Por su parte, desde el sindicato de empleados de comercio recordaron que Ley de Contrato de Trabajo vigente establece el descanso dominical, a pesar de las diferentes interpretaciones que se han hecho de la aplicación del artículo 18 del decreto 2284/91, que permite la libre apertura de horarios y días de trabajo en la prestación de servicios de venta y otras actividades comerciales afines, por lo cual sólo se trata de hacer respetar la ley.

En tanto, el presidente de la Cámara de Supermercados de Rosario, Roberto Lázaro, sostuvo que la posición del sector que representa es "no abrir los días domingo". Entre los argumentos esgrimidos, sostuvo que "para poder pagar jornada doble a los empleados el costo debería ser absorbido por el consumidor", pero indicó que uno de los principales inconvenientes con el que se encuentran los almaceneros y comerciantes rosarinos es la apertura de centros comerciales de cadena nacional o internacional, o sea, con casa matriz fuera de la región, quienes no dan señales de acompañar la propuesta".