Mié 15.08.2007
rosario

CIUDAD

Los médicos municipales tomaron el CEMAR y forzaron el diálogo

Fue ayer, en el primero de los cuatro días de un paro del sector que es fuertemente criticado por el intendente. A las 8 se reúnen con el secretario de Salud. A las 10, marchan.

Los profesionales de la salud que cumplen sus funciones en los efectores que dependen tanto de la Municipalidad como de la provincia coincidieron desde ayer en el paro por reclamos salariales, pase a planta permanente de los contratados y la exigencia de libertad sindical. En uno y otro sector el clima de descontento es similar por cuanto pudieron articularse las medidas, aunque los municipales continuarán un día más con el paro que comprende la cobertura de guardias mínimas y la atención de urgencias. El intendente Miguel Lifschitz fustigó ayer la medida de fuerza y alertó contra el peligro que los autoconvocados en conjunto dejen "desprotegida a la población más necesitada". También manifestó que quien no trabaje no cobrará. Ayer los profesionales municipales 'tomaron' el primer piso del CEMAR hasta que obtuvieron del secretario Miguel Capiello el compromiso de una reunión para las 8 de hoy y barajaron la posibilidad de un paro por tiempo indeterminado. Luego a las 10 habrá una manifestación conjunta desde San Luis y Dorrego hasta las puertas de Gobernación.

Los profesionales de la salud municipal que cumplieron ayer la primera jornada del paro que por 96 horas cumplirán esta semana decidieron cerca de mediodía apostarse en el primer piso del CEMAR, en San Luis y Dorrego, hasta que recibieron de la secretaria de Miguel Capiello el compromiso de una audiencia con los delegados que comenzará hoy a partir de las 8. El paro de los profesionales que dependen de la Municipalidad de Rosario coincidió ayer y lo hará hoy y mañana con el de los que trabajan para la administración provincial. En unos y otros efectores públicos sólo se cubren las guardias mínimas, las urgencias y las cirugías que ya fueron programadas, mientras no hubo atención en consultorios externos ni en los centros de atención primaria.

Ayer el intendente Miguel Lifschitz tuvo duros conceptos para con los médicos autoconvocados y dijo que "es muy delicado dejar sin salud a la población más necesitada con una medida que se realiza de manera simultánea" en las instituciones que dependen de Municipalidad y de la provincia. Pero a esta forma de advertencia por parte del intendente una de las delegadas, Lucía de Vincenti, alertó acerca que si no hay una propuesta que contemple los reclamos que plantean, la semana próxima puede haber una medida por tiempo indeterminado.

Lifschitz llamó a los profesionales a "reflexionar" porque se vive "en una sociedad con muchas inequidades...No hay que mirar sólo el ombligo de uno sino el conjunto", señaló el intendente.

De Vincenti recordó que tiempo atrás levantaron la medida de fuerza pero no el plan de lucha porque con el adicional de $ 200 universales "nos acercamos pero no llegamos a la canasta familiar". Ese adicional fue cobrado por médicos, psicólogos, fonoaudiólogos, kinesiólogos, bioquímicos y farmacéuticos pero quedó excluido el personal de enfermería, trabajadores sociales, técnicos y estadísticos.

De Vincenti calificó de oportunista las "amenazas" en cuanto a descuentos de días o el decir que se garantizará las prestaciones "porque de hecho nosotros aseguramos la atención de la urgencia en la misma organización del paro. Ellos no tienen la misma responsabilidad y actitud que los trabajadores respecto del diálogo, de hecho no les interesa cuidarnos a nosotros ni a la ciudad sino sólo las arcas municipales".

Desde la asamblea de autoconvocados se señaló que son 1050 las personas que se desempeñan en el área de enfermería, 49 como trabajadores sociales y 600 como técnicos. "La discusión que debe darse es cómo llegamos a la canasta familiar, después podemos discutir cronogramas de regularización. En definitiva levantamos las banderas que señala la Asociación de Trabajadores del Estado", dijo en referencia a que se llegue a la canasta familiar, a que se termine con el trabajo en negro y se respete el principio de libertad sindical. Ayer la asamblea de profesionales de la salud señaló que al Ejecutivo "no le interesa resolver el conflicto y en cambio a nosotros sí, no queremos un paro por tiempo indeterminado". También marcó que desde 15 años atrás se apuesta al proyecto de salud de la Municipalidad "y lejos de tener un reconocimiento automático tuvimos que salir a luchar. Deberían estar pensando en cómo se soluciona el conflicto y no en sanciones".

Los profesionales provinciales también solicitan un salario acorde a la canasta familiar aunque dicen que quedó atrasada cuando reclaman los $ 2.400, el blanqueo de todas las cifras en negro con el consecuente aumento del básico y el pase a planta de todo el personal contratado, alrededor de 1900, en el ámbito de la salud.

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