"Nunca hay solemnidad cuando estoy yo", dice un risueño Rep adelantando las bases que regirán su encuentro con los rosarinos. "Además no me imagino que el público que me venga a ver sea un público formal, jamás", agrega, y distingue: "No tengo lectores de diarios caretas como La Nación. Tengo algunos que me siguen por mi rareza, y si me siguen o vienen a mí es por una sensibilidad común. En ese sentido establecemos un vínculo. Nadie va a venir a tratar de enderezar hacia la formalidad una charla cuando se sabe que yo no voy a poder ser formal, jamás. Son conversaciones absolutamente descansadas, libres, donde se puede decir de todo muy informalmente". Además, Rep admite que la presencia de Mex garantiza aun más distención: "¡Encima ése, que es medio sacado también! Pero él tiene otro tipo de llegada a la gente, porque es más televisivo, es un actor. Yo no soy un actor, así que como te estoy hablando ahora voy a hablar en la charla. Yo establezco charlas, sinceridades muy excesivas, mucho desacartonamiento. Y no me veo repitiendo respuestas de otras charlas. Me gustan las preguntas sorpresa para poder sorprenderme respondiendo. Así que todas estas charlas, todos los actos estéticos, tienen que ser novedosos, siempre".

- Que también tiene relación con la libertad que habrá buscado en el 98 cuando rompió con la tira de personajes...

- Sí, siempre es la búsqueda de la no repetición.