"El cheque estuvo disponible recién tres semanas después de que terminamos el trabajo en Barrancas. No sería ético aceptarlo: los fondos debieron estar antes para hacer frente a los trabajo". Con esta frase Miguel Nieva retrucó ayer a la subsecretaria de Derechos Humanos Rosa Acosta luego que hiciera público que "existe un cheque a su nombre y lo dejo vencer sin pasar a buscarlo".

Nieva, miembro del Equipo Argentino de Antropologia Forense, señaló: "La verdad es que el trabajo en el cementerio de Barrancas se fijó la fecha y gente del gobierno provincial me llamó para decirme que estaba la plata para hacerlo, pero cuando puse la fecha del 30 de junio de este año, el cheque nunca lo tuve. Y en realidad lo tendría que haber tenido antes de este trabajo, y no después, para poder comprar los materiales, los gastos de movilidad. Sin embargo me llamaron tres semanas después para decirle que le llevara la factura para que me den el cheque. Yo no puedo recibir un cheque por un trabajo que ya estaba hecho tres semanas antes. Esto es una cuestión de ética, el pago debió haber estado disponible antes del 30 de junio para haber podido pagar todos los gastos y hacer el trabajo. Es más el trabajo del cementerio de Barrancas se hizo no solo porque el Equipo Argentino de Antropologia Forense corrió con los gastos, sino porque tuvimos el apoyo de la comunidad de Barrancas, que puso la gente a disposición nuestra para poder palear la tierra, junto a dos empleados de la Subsecretaría de derechos humanos, que llegaron en mi auto un día y en otro vehículo del juzgado federal, para que finalmente la subsecretaria pusiera un auto para que fueran al lugar. El trabajo se terminó poque el último día el personal del juzgado se puso a palear tierra para tapar los pozos que hicimos".