"Todos los clubes del fútbol argentino están como nosotros", afirmó ayer Horacio Darrás, actual presidente de Colón. Pero en verdad la situación de sabalera es muy singular. Porque la entidad rojinegra ya perdió un juicio con la AFIP por haber evadido cargas impositivas en el pago de los sueldos de los jugadores. En los clubes rosarinos la situación con el organismo recaudador es diferente, a pesar de que la AFIP, oportunamente, también le inició juicio a Ñuls y Central.

En ambos casos los dirigentes leprosos y canallas rubricaron un convenio de pago cuando se presentaron a convocatoria. La sede auriazul de calle Mitre, como así también la sede rojinegra del parque Independencia, también fueron allanadas por los sabuesos. En el caso de Ñuls se buscaba documentación referente a una causa contra el presidente Eduardo López. Pero de aquella demanda penal, que explotó con los allanamientos producidos en el club y en las propiedades de López en el 2003, luego no se produjeron mayores novedades.