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Desde Santa Fe

La diputada nacional Victoria Donda acompañó ayer a los hijos de Silvia Suppo, Marina y Andrés Destéfani, en la marcha por "verdad y justicia" que reclamó el esclarecimiento del asesinato de madre. "Uno tiene que estar donde tiene que estar y hoy había que estar acá, en Rafaela", dijo la legisladora. Y le pidió al gobierno de Hermes Binner que "asuma la responsabilidad de cuidar a los testigos" en los juicios de lesa humanidad que se realizan en la provincia.

Según los funcionarios del gobierno, Silvia había rechazado la posibilidad de incorporarse al Programa de Protección a Testigos de Santa Fe, pero Donda dijo que esa no es una explicación. "La verdad es que el crimen de Silvia me parece por demás sospechoso. La justicia no debería descartar ninguna hipótesis, independientemente que hoy haya dos detenidos. Los resultados de la autopsia y las pericias son altamente llamativos para una persona como era Silvia Suppo, una compañera tan comprometida en la denuncia al terrorismo de estado, una testigo clave en causas tan importantes para la provincia" por delitos de lesa humanidad. "Creo que es responsabilidad de las autoridades judiciales y política investigar esto", afirmó.

La respuesta que tuvo la marcha fue muy importante.

Si, la verdad que sí. Es importante sentirnos acompañados entre todos. Pero lo que falta acá es que el Estado asuma la responsabilidad de cuidar a los testigos. Ya tuvimos un Julio López, dos compañeros detenidos y decenas de testigos amenazados en la provincia de Santa Fe. La verdad es que si esperaban que pase esto para hacer algo, es un problema. Es una irresponsabilidad del gobierno, tanto nacional como provincial, y que evidentemente hay que hacer algo.