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Desde Santa Fe

El vicepresidente del Partido Justicialista, Jorge Fernández, le advirtió ayer al gobernador Hermes Binner que si promulga la ley de la boleta única no podrá apelar a la teoría de la "promulgación parcial", que "es de dudosa constitucionalidad, ya que el articulo 19 del proyecto, dispone la aplicación del sistema sólo para las elecciones generales (de julio) el 2011 y excluye expresamente las elecciones primarias (previstas para mayo)". "Si Binner recurriera a la promulgación parcial, la suya sería mucho más que una actitud especulativa, sería, sobre todo una práctica desleal e ilegal, tanto para sus adversarios externos como internos", planteó Fernández, uno de los referentes en la provincia del FpV que lidera el diputado y precandidato a gobernador Agustín Rossi.

Fernández consideró "cuanto menos extraño" que la ley fuera votada en la sesión del 25 de noviembre por los senadores del PJ "sin haber sido consultada en la reunión del consejo ejecutivo partidario que se llevó a cabo pocos días antes", dijo. El único que se abstuvo de votar fue precisamente el presidente del PJ, Ricardo Spinozzi, quien un rato antes anunció su renuncia a la jefatura de bloque, pero por otros motivos.

"Hay cuestiones que siembran dudas e incomodidades. En primer lugar, resulta cuanto menos extraño que el consejo ejecutivo del PJ se hubiera expedido por unanimidad sobre el calendario electoral y la necesidad de reducir los plazos para la presentación de listas de candidatos en las elecciones internas abiertas. Y que unos días después, los senadores justicialistas "con la excepción de Spinozzi voten "una modificación del régimen electoral sin siquiera haberla tratado en dicha reunión partidaria y sin ser consultada con los intendentes y presidentes Comunales. Lo que, en definitiva, supone una actitud inconsulta e inorgánica".

"Pero además continuó Fernández esta actitud parece que va a ser convalidada por un gobierno provincial que proclama la calidad institucional y la búsqueda de consensos pero, que termina actuando en sentido contrario. Digo esto porque una modificación, de tales características, requiere ser tomada en un tiempo prudencialmente alejado de una contienda electoral. Más allá del debate sobre la conveniencia o no del sistema propuesto, ese período prudencial es lo que aconsejan la práctica democrática y los más elementales manuales sobre dicha materia".