Los choferes del transporte urbano suspendieron ayer la seguidilla de paros con la que jaquearon a la ciudad de Santa Fe toda la semana. La decisión fue adoptada ante un pedido de los concejales del PJ para que suspendan las huelgas hasta el martes próximo, cuando el Concejo Municipal trate ﷓en una sesión especial﷓ un proyecto del intendente Martín Balbarrey que aumenta el boleto de un peso a 1,15.

El debate legislativo estaba previsto para ayer, y los trabajadores de UTA ya habían declarado dos paros por si el Concejo no aprobaba el aumento de boleto: uno debía comenzar a las ocho de la noche y hasta las seis de la mañana ﷓como sucedió a lo largo de la semana﷓ y otro, por 24 horas, se iniciaría en el primer minuto de hoy. Pero todo cambió a media tarde, cuando los concejales del PJ que tienen serias dificultades para aprobar el aumento a pesar de su mayoría holgada, resolvieron ganar tiempo. Postergaron el debate en el Concejo hasta el martes y le pidieron al gremio de los choferes que haga lo mismo con los paros. Lo que en la práctica significará una tregua de cinco días.