Que sea Página/12 es una garantía que se suma a la invalorable visibilidad de nuestra comunidad gay, lésbica, bisexual e intersexual que significa un suplemento de diversidad en un diario de distribución nacional y difusión internacional, con un marco de derechos humanos siempre reivindicados.

En 1984 la CHA publicó el primer “boletín” en un alarde de primera edición de un medio homosexual de una difusión masiva que no lo fue tanto, ni mucho menos. La primera publicación que cumplió con la promesa fue la revista Diferentes, en el tiempo de edictos y razzias policiales cuando vivíamos en la inseguridad cierta de salir a la calle sin terminar en la comisaría (esto intentando dar una perspectiva histórica seguramente injusta).

SOY se expresa en tiempo verbal del presente del indicativo, sin permisos ni vergüenzas. Desde una identidad que todavía y nunca será abarcada ni considerada. Pero que tiene a la discriminación como su marco identitario. Esa discriminación que enunciamos como homo-lesbo-trans-fobia que se expresa en los movimientos pendulares e igualmente fatales del insulto al asesinato. Hoy y todavía, a más de 24 años de democracia, siguen vigentes los desvergonzados códigos de faltas que criminalizan expresamente a las personas por ser homosexuales y travestis en diez provincias, con la inactividad de diputados/as y gobernadores. Las provincias son: Buenos Aires, Catamarca, Formosa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, San Juan, Santa Cruz, Santa Fe y Santiago del Estero. Que se hagan cargo, nosotros/as seguiremos con la denuncia.

Porque sabemos que esas denuncias y las que correspondan podrán tener un espacio en SOY, nuestro reclamo y agradecimiento. A nuestras/os amigas/os de Página/12 y SOY, un beso intenso tortillero, trabuco y mariquita.

Cesar Cigliutti
Presidente de la Comunidad Homosexual Argentina