Carácter no lucrativo: Debe existir una relación afectiva previa entre los comitentes y la gestante que debe ser demostrada durante el proceso judicial. Sí hay una compensación económica para cubrir todos los gastos relacionados con el tema.

Requisitos para ser gestante: El proyecto aclara que “no restringen los derechos de la gestante sobre su propio cuerpo, su libertad personal, privacidad, integridad física, seguridad y autonomía. Si durante la gestación se produce alguna de las causales de interrupción del embarazo autorizadas por el Código Penal, puede optar por algunas de las alternativas previstas en la ley”. Si durante el proceso llegaran a aparecer desacuerdos entre la gestante y los comitentes, el juez deberá dirimir el conflicto. Entre los recaudos para la protección de la gestante se incluye la obligación de que su consentimiento sea lo más informado posible. Que no pueda hacerlo más de dos veces y que tenga un hijo propio; es decir, debe haber pasado por un embarazo y parto, y conocer lo que implican. No puede aportar sus propios gametos y debe contar con asesoramiento y evaluación psicosocial previa.

Contra el turismo reproductivo: Se prohíbe que una persona radicada en nuestro país sea gestante para extranjeros. Tanto los comitentes como la gestante deben ser argentinos, naturalizados o con cinco años de residencia en el país.

Derecho a la información: Regula de manera expresa el derecho del niño a saber que ha nacido de gestante y también a conocer dónde viene el material genético. Si lo solicita, podrá acceder al expediente judicial donde debe figurar esta información.