Para todos los gustos
Una ventaja de Bariloche como destino de esquí es su diversidad turística,
que permite al viajero disfrutar del viaje al margen del deporte, algo que tienen
muy en cuenta aquellas familias cuyos integrantes no son todos esquiadores.
Por un lado, hay una agitada vida nocturna y gran variedad de negocios y de
ofertas gastronómicas. Pero lo más importante son las excursiones
tradicionales alrededor del lago Nahuel Huapi, la mayoría de las cuales
se puede realizar en invierno.



En función de diversificar la oferta y el público, las autoridades
turísticas de la ciudad han reforzado circuitos alternativos para no
esquiadores como los trekkings invernales, los paseos en trineo, las motos de
nieve, las caminatas con raquetas sobre la nieve y el esquí nórdico
y de fondo, dos opciones simples y muy placenteras que no requieren de aprendizaje
alguno.

Para que los padres puedan esquiar tranquilos, los niños desde los 45
días en adelante tienen propuestas a su medida, desde una nueva guardería
en la base del cerro –tres veces más grande que la anterior–
hasta la escuela de esquí para todas las edades, integrada por 200 docentes.
Las clases de esquí en la Escuela de Catedral Alta Patagonia pueden ser
grupales o individuales, y para los más avanzados se ofrecen desafíos
llamados esquí-safaris, que se internan por la montaña a través
de sectores vírgenes muy inaccesibles.

Cerro Catedral dispone de una versatilidad de pistas acorde a la necesidad y
la habilidad de cada uno. Del total de 50, los principiantes disponen del 15
por ciento de ellas, mientras que los intermedios un 60 por ciento, los avanzados
un 20 por ciento y los expertos un 5 por ciento. Entre estas últimas,
hay 8 que están homologadas para competencias internacionales de slalom,
slalom gigante y descenso. Además hay un sector de esquí de fondo
y otro para snowboard. La nieve del Catedral se caracteriza por ser húmeda
y compacta en la base, y seca y en polvo en la cumbre.

Extranjeros en la
nieve Gracias a las ventajas cambiarias, numerosos esquiadores chilenos
visitaron Bariloche durante el invierno pasado, y se espera que este año
nuevamente muchos de ellos dejen de lado los centros de su país y opten
por cruzar la cordillera. Sin embargo, la mayor cifra de extranjeros llegará
desde Brasil, un país que ya emitía mucho turismo a Bariloche
en tiempos de la convertibilidad. El mayor mercado es la ciudad de San Pablo,
que tendrá un “puente aéreo” directo con la ciudad
rionegrina.

En cuanto a su prestigio, San Carlos de Bariloche y Cerro Catedral alcanzaron
su mayor logro internacional a nivel turístico, al ser aceptados como
integrantes del sello de marca y calidad “Leading Mountain Resorts of
the World”, compuesto además por las ciudades de Vail en América
del Norte, Val Gardenia en Italia y Queenstown en Australia. Los integrantes
de esta asociación realizan publicidad y trabajo de marketing en conjunto
a nivel global.

Otra novedad de Bariloche es que las autoridades de la ciudad firmaron un acuerdo
de “hermandad” con la ciudad norteamericana de Aspen, Colorado,
mediante el cual se realizarán intercambios deportivos, educativos y
culturales.