El delta de Tigre, ese mundo que fluye con un rumor constante a caudal de agua, es un microcosmos de ríos y canales que nos envuelve poco a poco a medida que avanzamos en su complejidad. Hay muchas formas de abordarlo –todas complementarias– que no son más que la circunstancia que cada uno elige para deambular por ese laberinto de arroyos. Hay quienes se inclinan por los deportes a remo y otros por la relajada navegación a motor. Pero también hay muchos –lo demuestra la variedad gastronómica de las islas– que encuentran el mayor placer en comer mirando el río. A continuación, un informe con los restaurantes tradicionales y de moda a orillas del río Sarmiento y el Capitán.

Remanso gastronómico A lo largo de la serie de brazos entrelazados que conforman el delta hay una amplia variedad de restaurantes que se ajustan a los gustos y posibilidades de cada viajero. Sobre el río Sarmiento está El Remanso, cuyos dueños son el chef Héctor Córdoba y Juan Pastor Fernández, donde se puede comer en un salón con amplios ventanales o al aire libre al abrigo de una sombrilla, a dos metros del agua. Las especialidades son las parrilladas y los platos como el pollo al ajillo o al verdeo ($10). Una parrillada cuesta $12 por persona, y un lomo al champiñón $14. Entre las pastas figuran los tallarines al fileto ($7) o a la carbonara ($9). Para los postres recomiendan el tiramisú que prepara el señor Córdoba, y el flan casero ($3). Por último, los anfitriones suelen sorprender al visitante con un lemonchello también de elaboración propia, o con un ya famoso en la zona café express irlandés, que atrae a mucha gente los sábados por la noche. Además se ofrecen cabañas en alquiler. Se llega con las lanchas de Interisleña en media hora desde la Estación Fluvial. Teléfono: 4728-0575.

“Atelier” de cocina Subiendo un poco en la escala de precios, en el restaurante Atelier se puede comer por un promedio de $25 por persona. Atelier fue inaugurado en 1962, y es uno de los clásicos de Tigre, junto con el restaurante del Hotel Laura. Pertenece a la familia Fráncica, y está instalado en una hermosa construcción de estilo canadiense levantada en 1907 con madera pinotea, y cuenta con un parque de 5 hectáreas, una playa de arena y un sector de juegos para los chicos. Además hay 60 reposeras disponibles para que los comensales se queden a pasar el día completo si lo desean. Y si quieren pasar la noche o varios días, el hotel dispone de un conjunto de cabañas de estilo polinesio con techo de paja.
En Atelier se puede optar entre comer al aire libre o en un hermoso salón vidriado con dos chimeneas a leña. El entrecot a la parrilla y los ravioles caseros son la especialidad del lugar. Un pollo al oreganato, al ajillo, a la marsala, a la portuguesa o a la calabresa ($20). Un asado cuesta $16 y una milanesa de ternera, $10. El restaurante está ubicado sobre el río Capitán, a un kilómetro del Paraná de las Palmas. Se llega con la lancha colectiva de Interisleña en 60 minutos desde la Estación Fluvial ($10 ida y vuelta). Tel. 4731-3532 Sitio web: www.cabaniasatelier.com.ar

Gato al agua Un lugar muy concurrido los fines de semana es el restaurante Gato Blanco, cuyos precios oscilas entre los $26 y $39, con una entrada pero sin bebida ni postre. Abierto en 1987, el restaurante fue alguna vez una vieja casona típica del Tigre, construida en desnivel sobre pilotes de madera y con techo de chapa. Los grandes ventanales del comedor –con muchas plantas– tienen vista al río. Un muelle propio desemboca directamente en una terraza delante del restaurante, donde hay mesas al aire libre. A un costado está el jardín de invierno, que también alberga un sector de las mesas. Y quienes deseen comer en un contacto más directo con la naturaleza pueden optar por las mesas que se instalan sobre el césped de un sector verde que mide una hectárea. Después de la comida, prácticamente nadie resiste las ganas de recostarse en una reposera aorillas del río, mientras los chicos se divierten en el sector de juegos o en la cancha de vóley.
Entre las sugerencias del menú de Gato Blanco están las mollejas al verdeo con papitas españolas ($20), los sorrentinos a la crema con champiñones ($14), la trucha del sur a la manteca negra ($25) y el pollo a la cereza ($19). Para los postres las recomendaciones de la casa son las frutillas al marraschino ($12) y el mousse casero de chocolate con crema chantilly ($9). El restaurante abre todos los días para almorzar, y sólo los sábados para cenar. La dirección es río Capitán 80 (1ra. sección) y se llega por las lanchas de Interisleña ($7,20 ida y vuelta). Tel. 4728-0390 Sitio web: www.gato-blanco.com

Un viejo almacén Entre las opciones más económicas sobre el río Sarmiento está el restaurante La Riviera, donde se come en una terraza de madera ubicada directamente sobre el río. En lo que es hoy el edificio principal, funcionó hace 60 años una fonda que, como todo viejo almacén, tenía un mostrador de cedro que aún se mantiene en uso. Allí está apoyada una antigua máquina de café marca Oceánica totalmente de bronce, junto a la moderna computadora. En La Riviera la especialidad son las pastas y toda clase de minutas. Un menú del día cuesta $12, incluyendo una entrada de vitel toné o panqueque primavera, y un plato principal que puede ser pollo al horno u agnolotis, ravioles o fideos. Y el postre puede ser un panqueque con dulce de leche, flan casero o ensalada de frutas. Un bife de chorizo a la plancha cuesta $8, un omelette con queso $5 y una milanesa con papas fritas $7, al igual que la suprema de pollo. También se venden sandwiches de jamón crudo ($3,50) y de jamón y queso ($2). Tel. 4728-0177.