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El casco antiguo de Colonia de Sacramento se distingue por su variada gastronomía que abarca desde la alta cocina hasta comidas rápidas, siempre en restaurantes instalados en algún edificio colonial y con una decoración acorde. El local del Mesón de la Plaza, ubicado junto a la plaza Manuel Lobo, fue construido en 1867 y tiene dos salones con paredes de piedra al estilo portugués y otro con paredes revocadas de estilo español. Además hay un patio interno con mesas al aire libre. Un menú con una entrada de mayonesa de atún y un primer plato con pollo o peceto a la salsa madera o un lenguinis bicolor al pesto cuesta $ 20, incluyendo el postre. El pollo con salsa de trufas cuesta $ 12 y un lomito de cerdo al vino tinto $ 16,50.
La Pulpería de los Faroles, frente al Hotel Plaza Mayor, es uno de los restaurantes más antiguos de Colonia. Además de las mesas ubicadas en la casa colonial, también se puede optar por comer en la vereda a la luz de un farol y con vista al río. Entre los platos más pedidos se encuentran el pollo al ajillo $ 16, el estofado de cordero a la húngara $ 14 y los ravioles de verdura Carusso $ 14. Para los postres se recomienda la frutilla a la pimienta negra $ 16. La Pulpería de los Faroles queda en Misiones de los Tapes 101.
El restaurante Casagrande, ubicado en Misiones de los Tapes 143, ofrece un clima intimista en una casona del siglo XIX construida para albergar al consulado inglés. Un menú de tallarines con salsa 3 quesos y una copa de vino cuesta $ 9,50. Un chivito uruguayo (en realidad es carne de lomo) a la plancha con jamón, queso, panceta y una tira de morrón y ensalada más una copa de vino cuesta $ 23 (para dos personas).
El bar-restaurante Colonia Rock, ubicado en Misiones de los Tapes 157, ofrece una alternativa distinta con grupos de rock en vivo y una variedad de tragos y comidas rápidas. Esta casona de 1860 está sutilmente decorada con guitarras, posters de Led Zeppelin y Los Beatles y un viejo proyector de cine. También hay un patio interior con mesas alrededor de un aljibe, y uno de los salones fue decorado con juguetes viejos. En el piso superior hay una mesa de pool. Una milanesa napolitana con papas fritas cuesta $ 12,50; una hamburguesa completa $ 7 y una pizza muzzarella $ 4,50.