Fuentes policiales informaron que el procedimiento principal se realizó en la quinta situada a la altura del kilómetro 58 de la ruta 5, donde trabajaron los pesquisas de la Justicia de Mercedes que investigan el triple crimen de General Rodríguez, ya que un testigo vinculó a algunos de los ahora detenidos con ese episodio.

Además, en la vivienda allanada, que está valuada en unos dos millones de dólares, se hallaron cerca de 10 armas, una de ellas similar a la empleada para asesinar a Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina en agosto pasado.

Los voceros dijeron que la funcionaria detenida es Cristina Otero, quien trabajaba en la comuna de General Rodríguez, junto al ex funcionario Juan Manuel Poggi, procesado y detenido en la causa por la ruta de la efedrina.

También fue detenido un policía de esa zona y un agente del Servicio Penitenciario Federal, además de cuatro allegados -el padre, la madre, el hermano y una amiga- del empresario dueño de casa, que se halla en Miami, Estados Unidos.

El procedimiento principal, que incluyó la actuación del grupo policial especial Halcón, fue en la casa del empresario que según la policía se apellida Carli y es dueño, junto a su padre, de un local de venta de repuestos de máquinas agrícolas de la zona.

En la lujosa residencia, la policía encontró diez armas, entre ella una pistola .40, similar a la empleada en el triple crimen, una 9 milímetros, una 45, una escopeta y un rifle de repetición, entre otras.

También se halló una camioneta con una credencial de la agencia antidroga estadounidense, DEA, a nombre del prófugo, y un chaleco del grupo policial estadounidense Swat.

Las fuentes informaron que al menos un testigo que declaró ante la Justicia relacionó a uno de los detenidos en la quinta con la masacre de General Rodríguez, por lo que el juez Federal de Campana que investiga el tráfico de efedrina, Federico Faggionatto Márquez, invitó a participar del procedimiento al fiscal de Mercedes que interviene en la pesquisa del otro hecho.

La orden judicial se efectivizó un día después de que José Luis Salerno, socio de Ferrón, una de las víctimas del triple crimen, fuera liberado en la causa por la "ruta de la efedrina", un precursor químico utilizado para elaborar metanfetamina.

Ahora queda por resolver la situación procesal de Rodrigo Iturbe, un mexicano detenido semanas atrás, a quien se vincula comercialmente con los empresarios asesinados y a su vez con los mexicanos detenidos en julio último en una quinta de Ingeniero Maschwitz, en la que se detectó una cocina de drogas sintéticas, la más importante montada en América Latina, dijeron los voceros.

El magistrado investiga las operaciones de un cártel mexicano que había montado ese laboratorio en el que producía metanfetamina en base al precursor efedrina.

En tanto, para el viernes se espera la llegada al país, extraditado por Paraguay, de Jesús Martínez Espinoza, el sindicado líder de la banda de narcos mexicanos.