Sin desacoplarse de las malas noticias provenientes del exterior, el principal índice del Merval, cayó hoy 3,91 por ciento a 1087,61 unidades. En cuanto a los títulos públicos, presentaron un desarrollo más tranquilo. El Boden 2012 subió 0,36 por ciento y el 2015 quedó 2,30 arriba, mientras el Discount en pesos -la emisión más líquida- terminó 0,94 abajo.

El golpe lo dio Wall Street y se irradió por el resto de los mercados bursátiles del mundo, pero se agudizó en Europa al conocerse que el Deutsche Bank tuvo un rojo de 5100 millones de dólares durante 2008.

El sombrío escenario de negocios se debió básicamente a una caída mayor a la esperada en las ventas minoristas de diciembre en los Estados Unidos que cayeron un 2,7 por ciento, cuando los analistas esperaban un descenso del 1 por ciento.

Los expertos sostienen que en el marco de incertidumbre que se respira en todos los mercados, las apuestas y pronósticos se modifican con el simple paso de las horas y cualquier dato impacta sobre la conducta de los precios.

Otra noticia que llevó pesimismo a los mercados fue la caída de los precios de importaciones y exportaciones estadounidenses por quinto mes consecutivo, debido al desplome de los costos del petróleo y de muchos productos derivados del crudo.

La temporada de balances también mantiene en vilo a Wall Street, donde los inversores temen que la recesión se refleje en el resultado de las empresas del último trimestre de 2008.

En la Bolsa porteña las acciones movilizaron negocios por 37,42 millones de pesos y, según, los expertos no es un dato menor el escaso volumen operado en el momento de ponderar el interés de los compradores.