Al hablar durante la Cumbre de Lideres Progresistas reunidos en Viña del Mar, Cristina sostuvo que "los problemas económicos se pueden convertir en problemas políticos si no son abordados a tiempo" y sostuvo que "la actual crisis que tuvo su origen en el consenso de Washington tuvo experiencias en nuestra región que marcaron resultados nefastos para nuestros países".

En ese marco la presidenta destacó que "la Argentina fue el país donde se experimentó con mayor agudeza la privatización de todos los instrumentos y recursos del estado hasta casi demonizarlo, se manipulo la información económica y así se termino en una implosión del sistema financiero algo similar a lo que hoy vivimos".

Cristina dijo también que "esta situación nos da a los argentinos un expertis en el tema crisis, un expertis que no quisiéramos tener, pero lo cierto es que la Argentina había sido elegido como modelo de aquella época de los 90 y era presentado en las asambleas del FMI como eso, como un modelo de aquel esquema".

Al referirse a palabras del presidente de Brasil Lula Da Silva, Cristina dijo que "coincido con lo que decía el presidente Lula en el sentido que hoy estamos en otra situación, porque nuestros países han crecido y podemos enfrentar esta crisis con otros instrumentos".

Agregó que "por eso es muy saludable que en esta reunión está presente el vicepresidente de los Estados Unidos (Joe Biden) con quien ayer hablando coincidimos en que el crecimiento no vale sino llega a los pobres y a la clase media".

"Esta coincidencia que tenemos con los presidentes y presidentas de nuestra región y que vemos que también la misma postura tienen en los Estados Unidos está marcando que hay un cambio y que podemos entrar en una nueva etapa", señaló.

De inmediato la presidenta abogó para que "esa nueva etapa en la que podemos entrar debe tener reglas y que esa reglas sean cumplidas por todos los países" y ejemplifico con las algunas resoluciones de las Naciones Unidas que "son cumplidas por algunos, pero no por los mas poderosos".

"Estoy convencida que un mundo sin reglas es malo, pero si esas reglas sólo las cumplen los mas pobres también es malo, por eso es necesario este compromiso que debemos adoptar de que todos debemos cumplir las reglas", subrayó.

La presidenta participó en una mesa redonda que compartió con Bachelet, Lula, Rodríguez Zapatero, Biden, Brown, Vázquez, y el noruego Stoltenberg.

Al referirse a la reunión del G-20 en Londres la semana próxima Cristina pidió que "de esa reunión debemos salir con resultados concretos; la reforma de los organismos, el sostenimiento de los puestos de trabajo, los incentivos a la

demanda y el rol activo del estado son una parte central de los debates que debemos darnos en ese importante foro si queremos entrar en esta etapa de cambio".

"Lo real es que la sociedad está viendo como impacta esta crisis en su economía y por eso debemos articular, organizar y pensar en políticas proactivas, revalidando el rol del estado para salir a paliar estas situaciones" enfatizó.

Por último, Cristina instó a los lideres progresistas a "profundizar esta etapa de cambio que podemos comenzar a transitar porque se ha caído definitivamente un modelo y es la oportunidad para que podamos avanzar hacia un mundo más justo y con equidad".