La muerte de un manifestante fue admitida en un informe difundido por el portavoz del gobierno del primer ministro Abhisit Vejjajiva, Satit Wonghnongtaey, informó la agencia italiana ANSA.

Tropas antimotines ingresaron hoy a la zona ubicada frente a la sede del gobierno, en la cual la oposición instaló un campamento en el marco de las acciones de protesta contra el primer ministro Vejiajiva.

Los soldados lanzaron gases lacrimógenos y disparos de advertencia para dispersar a los manifestantes que bloquean las calles del centro de Bangkok, informó la prensa local.

Los manifestantes, que reclaman la renuncia del primer ministro y el retorno del ex premier Thaksin Shinawatra, en el exilio tras su derrocamiento en 2006, en las últimas horas quemaron un ómnibus y lanzaron bombas molotov contra los soldados.

En los choques, una persona murió y fueron heridas al menos 77 personas, entre ellas 4 que sufrieron hoy impactos de armas de fuego, 2 de ellas soldados, informó el Ministerio del Interior tailandés.

Ayer, el primer ministro proclamó el estado de emergencia y amenazó con "acciones decididas" contra los manifestantes. Las autoridades militares dijeron que no dispararán contra civiles, pero advirtieron que tienen órdenes de utilizar armas de fuego para "autodefensa".

Las protestas, registradas en Bangkok y distintas provincias tailandesas, obligaron a la cancelación el sábado de la cumbre de la Asociación de Cooperación del Sudeste Asiático (ASEAN), que debía celebrarse en Tailandia.

La medida prohíbe reuniones de más de cinco personas y otorga a la policía facultades extraordinarias para realizar detenciones. Sin embargo, miles de manifestantes ignoraron la medida y confluyeron en la ciudad, bloqueando varias calles. Los manifestantes reclaman la renuncia del gobierno.

Por su parte, el portavoz del gobierno afirmó que "en las próximas horas serán tomadas varias medidas para garantizar la seguridad de los grandes puertos, aeropuertos y principales infraestructuras".

"Les aseguramos que la situación de los combates en Tailandia está volviendo bajo control", agregó el vocero.

El Puea Thai, principal partido de la oposición, reclamó al primer ministro convocar a una reunión de emergencia del parlamento para encontrar una salida a la crisis.