El ministro de Economía, Amado Boudou, explicó que "la Argentina es un país miembro del organismo", y señaló que el Gobierno nacional intenta "participar dando la visión argentina de hacia dónde tiene que ir" el Fondo Monetario Internacional.

Luego del encuentro que mantuvo ayer con el responsable del FMI para el Hemisferio Occidental, Nicolás Eyzaguirre, el titular de la cartera económica afirmó que "el Fondo empezó a revisar sus prácticas" luego de la crisis financiera mundial y "la Argentina, en un momento en que no necesita financiamiento, quiere llevar la discusión institucional participando en estos términos".

Boudou también negó que el Fondo Monetario Internacional haya puesto condiciones al expresar que "no se puede poner condiciones a quien nada está pidiendo", y contó que el diálogo con el emisario chileno giró en torno de "los avances del INDEC, cuál es nuestra visión del organismo", y "se trató de discutir la relación y la participación del país" en el FMI.

"En otros momentos se discutían salvataje, financiamiento, y venían los famosos paquetes de ajuste, la política que se ensayó varias veces en la Argentina y que lamentablemente fue teniendo fracaso tras fracaso", recordó el titular del Palacio de Hacienda.

En cambio, señaló que ayer "la reunión fue muy distinta", se trató de "discutir el futuro" y quedó claro que "la política económica y monetaria de la Argentina se decide en la Argentina". "Esta fue una visión compartida, y por eso me pareció que fue una reunión muy exitosa", sintetizó Boudou.

Por otra parte, reconoció que "para nosotros es importante resolver el tema del Club de París, no sólo por las cuestiones financieras sino por el impacto que puede tener en la economía real". En cuanto al canje de deuda que comienza mañana, adelantó que "va a estar abierta por una semana. Y tendrá dos etapas: en la primera, abordaremos las deudas de más corto plazo, los pasivos tendientes a mejorar el perfil de la deuda 2010, 2011, 2012, años en los cuales, la verdad, la Argentina tiene una situación holgada".

Agregó que "este año vamos a terminar pagando poco más de 20 mil millones de dólares, pese a que muchos analistas pensaban que iba a ser un año crítico, pero la Argentina pudo hacer frente a todos los compromisos".

"El último compromiso importante fue el mes pasado con el BODEN 12. Nos queda solamente parte del cupón del PBI que son alrededor de 1500 millones para diciembre de este año", dijo.

"Los próximos años serán más desahogados que el 2009. También estamos mejorando el perfil de esa deuda para poder seguir asignando fondos a los planes de infraestructura y obras públicas, que no sólo generan un sostén de la economía, sino nuevos empleos formales, y además generan obras importantes para la economía pública y privada del futuro", sintetizó.