"Gracias a Dios que estoy yo", declaró durante una entrevista con una radio romana. El controvertido mandatario calificó de "farsa" los dos procesos pendientes contra él que ahora podrán reanudarse y aseguró que seguirá gobernando "tranquilo y despreocupado (...), con más energía, si cabe", informa la agencia de noticias Ansa.

Los 15 jueces del tribunal consideraron inconstitucional el llamado "Laudo Alfano", que desde 2008 garantizaba inmunidad jurídica a los cuatro principales funcionarios del gobierno, incluyendo a Berlusconi, y frenaba los procesos que seguían al mandatario por corrupción y fraude.

El veredicto estableció también que la controvertida norma "viola el principio de igualdad" de los ciudadanos ante la ley.

Berlusconi respondió furioso a las primeras reacciones políticas al fallo. Durante una entrevista con el programa de televisión "Porta a Porta", anoche sostuvo que una política opositora era más "bonita que inteligente", al parecer refiriéndose a la diputada Rosy Bindi, del partido de izquierda PD.

Visiblemente airado, agregó que todo el país es "de izquierda" y "comunista" y tampoco ahorró ataques al Tribunal Constitucional, al que calificó de "rojo" y "comunista".

El presidente italiano, Giorgio Napolitano, dijo ayer que la decisión del Tribunal Constitucional fue recibida "con respeto", según trascendió en el Palacio del Quirinale, su residencia oficial, a lo que Berlusconi respondió hoy que "ya se sabe de qué lado está" el mandatario.

Pocas semanas atrás, la Abogacía General del Estado había advertido que el rechazo del "Laudo Alfano" podría comportar la dimisión del primer ministro, informó la agencia de noticias Europa Press.

Esta posibilidad alteró el ambiente dentro del partido el Pueblo de la Libertad, y de su principal aliado, la Liga Norte, y ya hay quienes hablan de convocar nuevas elecciones generales entre el 21 y el 22 de marzo, coincidiendo con los comicios regionales.

El fallo, se produce, además, en un momento en que el premier se ve acosado por un escándalo con prostitutas, una relación en franco declive con la Iglesia, tres días después de una enorme marcha en repudio a su gestión, y a dos días del fallo que lo declaró "corresponsable" en un caso de corrupción.

El premier dijo que además el gobierno es "absolutamente indispensable para el bienestar del país". Berlusconi dijo en Radio Rai que gobernó sin esa ley desde 2001 a 2006 "y continuaremos" haciéndolo sin ella, según reproduce El País.

"Me defenderé más veces en los tribunales y expondré al ridículo a los acusadores mostrando a los italianos de qué material están hechos", afirmó el primer ministro. "Y también verán de qué pasta estoy hecho", sentenció.