La comisión del gobierno de facto había acusado a Zelaya de mantener "un silencio de 48 horas" porque rechazó una propuesta formulada el 19 de octubre y desde entonces no se han vuelto a sentar frente a frente en busca de solucionar la crisis causada por el golpe de Estado del 28 de junio.

Según la propuesta del gobierno de facto de Micheletti, la Corte Suprema --integrada por 15 magistrados-- deberá decidir si se restituye a Zelaya en el poder, pero el mandatario depuesto pide que sea el Congreso.

Una negociadora del gobierno de facto, Vilma Morales, propuso hoy en rueda de prensa que cada comisión consulte con el poder del Estado que quiera. "Ambas partes han propuesto diferentes instancias al poder público, por una parte la Corte Suprema de Justicia y por otra al Congreso Nacional, para decidir la diferencia sobre la pretensión de Manuel Zelaya, por lo que proponemos que las mismas, ejercitando su derecho constitucional, acudan ante quien corresponda al amparo de las garantías procesales", dijo Morales.

Rivera expresó que la comisión de Zelaya regresaría al diálogo si los llamaban a firmar la restitución del mandatario depuesto. "Yo dije que si no era una propuesta tan próxima al Acuerdo de San José como para que sea firmada y, bueno, ésta (la nueva oferta) puede ser", dijo.

El Acuerdo de San José es el plan para solucionar la crisis del mediador, el presidente costarricense y Premio Nobel de la Paz, Oscar Arias, que contempla la restitución de Zelaya.