Fuentes del cobismo dijeron a la prensa que "por ahora estamos en cero porque el sector de Morales quiere incorporar a la conducción a dirigentes que no son representativos en sus propios distritos".

"No queremos forzar una votación para elegir a las autoridades porque en la votación un sector derrota a otro y entonces no podremos hablar de unidad del partido ni de consenso", agregaron las fuentes, que dijeron estar "en comunicación permanente con Cobos que quiere llegar a una posición que contenga a todos".

Los delegados del radicalismo aspiraban a designar esta noche al senador Ernesto Sanz como titular de la UCR, en reemplazo de Morales.

Según informó el propio titular de la UCR, Gerardo Morales, Ángel Rozas quedaría en la vice primera y Pablo Verani ocuparía la segunda vicepresidencia del organismo partidario, en tanto que el acuerdo incluiría además la designación como secretario general de la UCR a Jesús Rodríguez.

Mientras en el primer piso del Comité Nacional partidario, los representantes de ambos sectores continuaban negociando, en la planta baja aguardan algunos delegados que todavía no llegan al quorum necesario para iniciar el debate.

El sector más bullicioso del radicalismo lo constituye la Cantera Popular, corriente mayoritaria de la juventud radical, que con sus bombos y cánticos matizaban la espera.

Según voceros partidarios, las negociaciones que se realizan en el primer piso de la sede de la UCR están a cargo de los dirigentes Gerardo Morales, Ernesto Sanz, Jesús Rodríguez, Horacio "Pechi" Quiroga y Enrique "Coti" Nosiglia, entre otros.

Si bien hace unas horas parecía que el plenario iba a comenzar, ya que Rozas, Sanz y Morales se aprestaban a subir al escenario del salón de actos del Comité Nacional, minutos después los dirigentes regresaron al primer piso de la sede partidaria.

Las diferencias estarían centradas en la discusión por la vicepresidencia tercera de la conducción partidaria.

Los más optimistas aseguran que el plenario podría comenzar en una hora, pero otros sostienen que finalmente los radicales volverán a su tradición histórica de finalizar el debate en horas de la madrugada.