Jue 28.10.2010

22:28  › ELECCIONES PRISIDENCIALES

Brasil tiene cara de mujer

La candidata oficialista, Dilma Rousseff, aseguró que si gana el ballotage del próximo domingo, tal como anticipan las últimas encuestas, encabezará un gobierno con "mirada social". "Estoy para garantizar" las conquistas de Lula da Silva y avanzar hacia un "país sin miseria y el pleno empleo", señaló.

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Con el gobierno anterior -añadió, refiriéndose al de Fernando Henrique Cardoso- había inflación, el desempleo estaba en alza, el salario mínimo no tenía poder de compra, faltaba comida en la mesa de muchas familias y teníamos una dependencia total del FMI, que prácticamente era quien mandaba en el país", recordó Rousseff. La ex ministra de Lula aseguró que el actual gobierno "colocó al país en el rumbo del crecimiento" e hizo posible que Brasil y el pueblo crezcan "juntos lado a lado".

Rousseff defendió la continuidad de las actuales políticas económicas y se comprometió a "fortalecer" los programas en curso y "aprovechar el escenario de estabilidad" para bajar los impuestos en el transporte, la salud, la energía y a las pequeñas y medianas empresas.

En un spot de campaña difundido a través de la Cadena Nacional, el Partido de los Trabajadores recordó algunos éxitos de la política económica de Lula, como la tasa de crecimiento que en 2010 será "superior" del 7 por ciento y la salida de 28 millones de personas de la pobreza absoluta. "No podemos volver al pasado en el que los ciudadanos no podían recibir un crédito, viajar en avión o comprar su casa propia. Ese es el gran peligro que se esconde detrás del modelo de gobierno que representa mi adversario", prosiguió la candidata más votada en la primera vuelta, celebrada el pasado 3 de octube, cuando obtuvo el 46,9 por ciento de los sufragios, frente al 32,6 de José Serra.

El equipo de campaña de la candidata oficial destacó la ventaja que le otorgan todas las encuestas por sobre José Serra, del Partido de la Socialdemocracia. "A tres días de las elecciones todos los institutos de opinión pública garantizan la victoria de Dilma Rousseff, Brasil está seguro", celebró la publicidad del Partido de los Trabajadores. La propaganda menciona que la encuestadora Sensus otorgó ayer 17 puntos de ventaja a Rousseff, y coincide con la tendencia expresada esta semana por Datafolha y Vox Populi.

Serra declaró que las encuestadoras no son confiables y las acusó de manipular los datos.

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