El Frente para la Victoria aspira a que la Cámara baja otorgue la semana próxima la media sanción que necesita la iniciativa para ser girada al Senado y convertida en ley antes del 30 de noviembre, fecha en que finalizan las sesiones ordinarias. "La intención del oficialismo es pedir una sesión especial para tratar (la iniciativa) el miércoles", afirmó la diputada kirchnerista Patricia Fadel.

Con el apoyo de los bloques de la Concertación y de Nuevo Encuentro, el oficialismo consiguió ayer emitir dictamen de mayoría (23 firmas) al proyecto de Presupuesto 2011, que contempla un crecimiento de 4,3 por ciento, una inflación de 8,9 por ciento y una previsión de dólar de 4,10 pesos.

En tanto, la oposición firmó otros dos despachos: uno de Proyecto Sur y otro que aglutinó 21 firmas del denominado Grupo A, que integran la UCR, PRO, GEN, Peronismo Federal y Coalición Cívica y Frente Cívico, que lograron sortear a las apuradas las diferencias que tenían en torno al pago de deuda con reservas, poco antes de que venciera el plazo de presentación.

El proyecto diseñado desde el Gobierno prevé que los gastos corrientes y de capital para 2011 ascienden a 372.911,9 millones, y la recaudación de impuestos nacionales y de contribuciones de la seguridad social rondaría los 492.178,6 millones de pesos.

El grupo A, por su parte, cerró filas detrás de la propuesta de la Coalición Cívica, que no contempla la utilización de reservas para el financiamiento del Estado y hace eje en que los ingresos del año próximo serán mayores vía Anses, Banco Central y Banco Nación.

El despacho redactado por Lozano, a su vez, reconoce mayores gastos e ingresos y, aunque no altera el resultado financiero que propone el proyecto oficial, plantea que la "clave" de la discusión presupuestaria pasa por la "restitución de las contribuciones patronales y la revisión de las exenciones tributarias".

El debate de las iniciativas llevado adelante ayer en la comisión de Presupuesto que comanda el kirchnerista Gustavo Marconato derivó en algunas particularidades: la socialista Alicia Ciciliani expresó la necesidad de que el gobierno tenga sancionado el presupuesto en tiempo y forma, pero finalmente no firmó ningún despacho de comisión.

Fuentes del socialismo no descartan que esa fuerza se abstenga en la votación de la iniciativa u otorgue la libertad de acción. En el grupo A, en tanto, el diputado Horacio Alcuaz (GEN) también buscó diferenciarse y firmó en disidencia parcial el dictamen opositor.

Entre otras cuestiones, la propuesta del grupo A hace un recálculo de los gastos e ingresos; establece que la Anses sólo se ocupe del pago a jubilados y pensionados; y redirecciona el pago de la Asignación Universal por Hijo con excedentes del Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN).