El político, de 59 años, prestó juramento sobre la Constitución en una ceremonia rodeada de medidas de seguridad sin precedente, que culminaron con la detención de 120 manifestantes opositores, quienes denunciaron como fraudulentas las últimas elecciones. Tras la asunción, que terminó con salvas y tañido de campanas, Putin nominó a su antecesor, Dimitri Medvedev, de 46 años -quien lo había sucedido en la presidencia en 2008 luego de su segundo mandato- para el cargo de primer ministro, y el Parlamento inició las consultas para su investidura, cuya aprobación se descuenta.

Putin, quien juró que protegerá la seguridad y la independencia del mayor país de la Tierra, calificó la presidencia de Medvedev como exitosa y afirmó que "dio impulso adicional a la modernización de Rusia".

Tras jurar el cargo en el Salón Andreyevski, Putin recibió el "maletín nuclear", que simboliza el poder sobre el segundo arsenal atómico más grande del mundo, después del estadounidense.

Su primer acto oficial será el próximo miércoles, cuando encabece un gran desfile militar como jefe de las Fuerzas Armadas en la Plaza Roja de Moscú, con motivo del Día de la Victoria sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.