20:33 › LA LARGA SAGA DE HUGO TOGNOLI
En el marco de la causa que investiga al ex jefe de la policía de Santa Fe, Hugo Tognoli, declararon el titular de la seccional 2da de Rosario, Néstor Fernández y un cabo de la localidad de Villa Cañás. Ambos rechazaron las acusaciones de haber dado protección a narcotraficantes y seguirán detenidos hasta que se resuelva su situación procesal.
El jefe de la comisaría segunda de Rosario, Néstor Juan Fernández, y el cabo Carlos Quintana fueron indagados por el juez federal Carlos Vera Barros y seguirán detenidos en dependencias locales de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). Están imputados en la causa por la que está detenido el comisario Tognoli, investigado por presunta protección a narcotraficantes del sur de Santa Fe.
Fernández fue arrestado ayer por la tarde en su lugar de trabajo, la seccional segunda, ubicada en el centro de Rosario, de donde salió esposado y custodiado por personal de la PSA.
El abogado defensor del comisario, José Luis Vázquez, dijo en Tribunales que "en todo el expediente no hay ninguna referencia respecto a Fernández, ni un indicio, ni una presunción, no hay absolutamente nada". Consideró que "esto es cuanto menos una privación ilegal de la libertad".
El titular de la comisaría segunda de Rosario sería quien tenía una clave de acceso al sistema de identificación de patentes con la que supuestamente se hizo la averiguación para avisarle a un narco que la PSA lo estaba siguiendo. Según los investigadores, gracias a ese aviso, Carlos Andrés Ascaíni, un hombre de 37 años procesado por narcotráfico, logró escapar de un procedimiento de la fuerza federal.
La defensa de Tognoli, encabezada por Eduardo Jauchen, difundió un acta de abril de 2008 por la cual su defendido hizo entrega de esa clave "en sobre cerrado" al comisario.
Sin embargo, el abogado de Fernández afirmó que él recibió "la clave como integrante de la fuerza policial, después esa clave estaba en la computadora de la brigada con el número de usuario y contraseña, porque es un elemento de trabajo" al que otros agentes también tenían acceso.
De acuerdo a la investigación de la PSA, Ascaíni llamó a la comisaría de la localidad de Villa Cañás, donde reside, para preguntar por dos vehículos que lo seguían. Desde allí, presuntamente el cabo Quintana -el otro detenido que declaró hoy- averiguó que se trata de coches oficiales de la fuerza federal y le dio aviso a Ascaíni, que logró eludir el procedimiento.
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