La Sala Séptima de la Cámara accedió al pedido efectuado por el fiscal Andrés Madrea, quien se había manifestado en contra de los sobreseimientos. El fallo también ordena que se profundice la investigación por presunto "cohecho" sobre los empresarios que operaban el local del barrio de Palermo donde el 10 de septiembre de 2010 se produjo un derrumbe en su entrepiso provocando la muerte de dos jóvenes y heridas 14 personas.p>

La resolución dispone que se profundice la investigación en torno a Farrel, Saikauskas; al jefe del Departamento Esparcimiento, Norberto Cassano; y al inspector que habría dado la habilitación de Beara, Carlos Mustapich, entre otros. Además deberán analizarse las conductas del arquitecto encargado en verificaciones y habilitaciones, Isaac Rasdolsky; Gustavo Amarú, quien habría avalado la construcción derrumbada, y los gestores Leandro Camani y Matías Luis Pantarotto.

"No podría desecharse una línea de falencias de segundo orden referida a que hubieran fallado los controles de fiscalización gubernamental sobre el uso y la explotación nocturna", dijeron los camaristas Mauro Divito, Rodolfo Pociello Argerich y Juan Cicciaro.

Por las heridas sufridas en el derrumbe fallecieron las jóvenes Ariana Beatriz Lizárraga, de 21 años, y Paula Leticia Provedo, de 20, en tanto otros 14 asistentes a esa fiesta privada sufrieron heridas de diversa consideración.

En esta causa Juan Carlos Yun, Agustín Dobrila, Roberto Kattan Coria, e Iván y Ronaldo Flies, integrantes de la sociedad "El viejo sabio", que administraba el local; y Maximiliano Frattini, quien organizó la fiesta, están a la espera del juicio oral y público.