Guillermo Moreno ya fue sobreseído en otra causa similar iniciada por diputados de la oposición, que finalmente fue archivada. En aquella oportunidad actuaron el juez federal Julián Ercolini y Guillermo Marijuán como fiscal, y la Justicia entendió que “no se apreciaba una actividad delictiva en los términos denunciados”. El funcionario, por su parte, había sostenido que las multas cuestionadas habían sido aplicadas de acuerdo con la ley de Lealtad Comercial y que incluso tres consultoras –las de Melconian, Bevaqua y Ferreres– están siendo investigadas por la Justicia en lo Penal Económico, por acciones impulsadas por los fiscales del fuero.

Moreno entregó hoy al juez federal Claudio Bonadío copias de las querellas que formuló contra consultoras privadas a las que acusó de publicar informes falsos sobre la evolución de los índices de precios. "Le expliqué al juez cómo (el CEO del Grupo Clarín, Héctor) Magnetto y algunos dueños de medios y banqueros trabajaban para elevar la tasa de interés y forzar la devaluación", señaló Moreno a los periodistas tras completar el trámite en los tribunales de Comodoro Py.

El secretario de Comercio comparó la situación que atribuyó a Magneto y a algunos "empresarios" y "banqueros" locales, a lo que ocurrió en Londres tiempo atrás, cuando determinados bancos fueron acusados de manipular la tasa Libor con objetivos espurios. Recordó que en esa investigación "terminaron con condenas" y que su instrumentación es "muy similar" a lo que pasó en Argentina con los índices difundidos por las consultoras privadas que adolecen de rigor científico.

En su presentación ante el juez, Moreno rechazó haber incurrido en delito alguno y dijo que se limitó a aplicar las leyes vigentes sobre Lealtad Comercial cuando impuso multas de 500.000 pesos a varias consultoras, entre ellas la que originó el sumario que instruye Bonadío.

"La importancia de los hechos que denuncio estriba en que los delitos de carácter económico en general, además de afectar el patrimonio individual de un número de personas indeterminado, también lesionan el orden económico-social", subrayó. El funcionario reseñó las características de las consultoras que "venden" o "tergiversan" datos estadísticos "tendientes a mejorar la tasa de ganancia de manera espuria de sus clientes".

En sus denuncias dijo además haber brindado datos pormenorizados sobre cómo bancos y compañías financieras, a través del "modus operandi" de "empleados y funcionarios infieles del sector público nacional" (área de Índice de Precios del INDEC), influían sobre el valor de títulos públicos en poder de los primeros.