"Hace meses que reclamamos de distintas maneras nuestro rechazo a esta reforma educativa que pretende implementar el gobierno de (Mauricio) Macri, ya que encontramos que representa una merma en el nivel académico de las escuelas", dijo Matías Delgado, presidente del Centro de Estudiantes del Mariano Acosta. Afirmó que "estamos de acuerdo con una reforma", pero sostuvo que la misma "se tiene que dar con una intención de mejora".

Delgado precisó que la toma, que se votó en asamblea, continuará hasta "recibir una respuesta concreta del gobierno porteño". El dirigente estudiantil informó en diálogo con la agencia Télam que además del Mariano Acosta y el Normal 1, hay otras escuelas secundarias porteñas "en asamblea", por lo que no se descarta que se sumen nuevas tomas.

"Queremos que los docentes y alumnos sean actores partícipes de esta reforma, queremos intervenir resolutivamente en el armado de los planes de estudio", indicó el presidente del Centro del Mariano Acosta. Añadió que "otro de los reclamos que presentamos a través de la toma es poder mantener la riqueza educativa que hay en la Ciudad".

El gobierno porteño, tras una serie de tomas efectuadas en 2012, resolvió efectuar durante este año jornadas de debate en las escuelas para explicar las características de la "Nueva Escuela Secundaria de calidad" (NESC) a implementarse en marzo del 2014. La NESC surge como respuesta del Ejecutivo capitalino a las nuevas pautas establecidas por el Consejo Federal de Educación a todas las provincias del país. En el caso de la Ciudad, su aplicación corresponde a un programa elaborado por el gobierno de Mauricio Macri, en el que reduce la carga horaria de materias como "Historia" o "Geografía" en los colegios normales.

El ministro de Educación de la Ciudad, Esteban Bullrich, cuestionó las tomas en los secundarios y afirmó que con esta medida los estudiantes "están atacando una vez más a la escuela pública". En declaraciones formuladas a radio Del Plata, aseguró que "no hay una razón para tomar la escuela" y que los establecimientos que comienzan a implementar la reforma educativa en 2014 lo hacen porque "lo han elegido voluntariamente".

"Las escuelas cuyos equipos directivos han elegido voluntariamente comenzar la reforma en el 2014 son escuelas que verán afectadas sus materias recién para los (alumnos) que ingresan en primer año", precisó Bullrich. Agregó que esta elección "no ha sido por imposición ni mucho menos" y que hay otras escuelas "que han pedido más tiempo y se les otorgó una prórroga hasta el 2015".

El ministro también desmintió que "haya falta de diálogo" con la comunidad educativa, ya que "con Matías (Delgado, presidente del Centro de Estudiantes del Mariano Acosta) y Lucía (del Centro de Estudiantes del Normal 1) me senté (a dialogar) el 22 agosto". "Escuchamos las propuestas y a partir de ellas han surgido cambios", contó.