Para el mandatario provincial, la de ayer fue "una elección parlamentaria como otras tantas, que pueden tener resultados que no coinciden con las ejecutivas", y destacó que "hay que respetar e interpretar la voluntad popular, hacer una reflexión y seguir laburando con todo".

"Las elecciones parlamentarias tienen una diversidad, con alternativas muy amplias, y cuánta más diversidad pueda haber, es bueno para la democracia", advirtió Daniel Scioli, para quien antes del 2015 "va a pasar mucha agua debajo del puente". "Se abren otras instancias, otro tiempo. Tenemos más de la mitad de mandato por delante. Las definiciones que tenía que tomar en su momento las tomé y ahora mi futuro inmediato es seguir trabajando con mis colaboradores y ser coherente con lo que veníamos sosteniendo", añadió.

El gobernador bonaerense dijo que "siempre" busca "la interpretación más profunda en cada elección" y que, con su mensaje de ayer, trató de "llevar tranquilidad y confianza" a la ciudadanía. "Para mí, la política no es vida o muerte, ni el vale todo para como sea alcanzar un objetivo. Lo que busco siempre es hacer lo correcto, mirando siempre a la gente y a quienes me dieron responsabilidad. La vida es una maratón, no es una carrera de cien metros", añadió.

Al ser consultado sobre las interpretaciones que hablan del "fin del kirchnerismo", Scioli respondió que "es una subestimación" y añadió que "el Frente para la Victoria expresa cuál es el contenido de las políticas que permitieron la recuperación de un país para ponerlo en la senda del desarrollo".

El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, por su parte, aseguró que el Frente para la Victoria (FpV) ayer tuvo en su provincia "una contundente victoria electoral, con el 61,4 por ciento" de los votos. "Hemos tenido la mayor victoria en la categoría senadores de todos los distritos electorales, con una diferencia de 27 puntos respecto a la segunda fórmula", agregó Capitanich en declaraciones a radio América, y añadió que "de cuatro diputados que se renovaban, 3 pertenecen al FpV, aumentando en uno la proporción relativa respecto de 2009".

En el ámbito de la legislatura provincial, que renovaba la mitad de sus bancas, los resultados obtenidos implican "una distribución de 10 a 6 (...) lo que permite reafirmar de modo categórico el liderazgo político" en la provincia, generando un aporte muy fuerte al proceso de transformación que vive la Argentina".

Respecto de los resultados generales a nivel nacional, Capitanich afirmó que "la lectura política que hay que hacer de estas elecciones es que hay un voto estructural que se consolida, que es el que apoya lo realizado por el gobierno, y una nueva agenda que en términos cualitativos expresa la sociedad desde la oposición".